El joven, que unos treinta años, se encontraba junto a su progenitor intentando solucionar una avería en el remolque, en el mecanismo de enlace entre el eje y la rueda. Según explicaron algunos vecinos, el chico y su padre colocaron unas calzas para sujetar la carga, habían retirado ya la rueda y el joven se encontraba bajo la tolva cuando cedieron los sistemas de sujeción, volcando el carro y aprisionando al joven.

El padre alertó de inmediato a varios vecinos del pueblo, situado a escasos kilómetros, que acudieron rápidamente a la zona e intentaron socorrer al joven. Consiguieron liberar el cuerpo de Rafael Nogués, pero ya había fallecido. También se personaron, advertidos por el servicio de emergencias del Gobierno de Aragón, sanitarios del centro de salud de Sariñena que solo pudieron certificar su muerte.

Bomberos del Bajo Cinca, por si era necesaria su intervención,y dos patrullas de la Guardia Civil, que levantaron atestado de lo sucedido, también se presentaron en el lugar de los hechos.

El joven, que estudiaba Ingeniería en Zaragoza y se ocupaba también de las tierras, era muy conocido en la localidad, donde su familia regenta un bar.

Este es el cuarto accidente mortal de un tractorista que se produce en el Alto Aragón en los últimos dos meses. A principios de diciembre murió en Torres del Obispo (Graus) un hombre de 83 años que sufrió un desvanecimiento mientras conducía. En Sandiniés, en octubre, murió un joven de 37 años al caer con su vehículo por un terraplén, días antes de que otro agricultor, de Camporrells, quedará atrapado tras volcar con el tractor.