El test de la verdad a Silva Sande marca una nueva zona donde buscar el cadáver de Cordón

El IMLAacaba de recibir una cuarta petición para hacer las pruebas P300 y P400 a un sospechoso de Pontevedra

Cristina Andreu, doctora en Psicología forense, muestra los ordenadores de los P300 y P400.
El test de la verdad a Silva Sande marca una nueva zona donde buscar el cadáver de Cordón
a. alcorta

El test de la verdad realizado al exmiembro de los Grapo, Fernando Silvia Sande, va a modificar el lugar donde la Guardia Civil volverá a buscar a Publio Cordón en Mont Ventoux. Los agentes rastrearán en la misma ladera sur, cerca de Bedoin, pero más al norte, ya que las reacciones de Silva Sande, al mostrarle ciertas fotografías y responder preguntas, insistieron en un punto que está situado a 300 o 400 metros al norte del bosque Perrache en el que se buscó en junio de 2013.


Antes de a Sande, se habían sometido a las pruebas el presunto descuartizador de Ricla, Antonio Losilla, y Miguel Carcaño, asesino confeso de Marta del Castillo, sin que los resultados obtuvieran éxito. Ahora, el equipo del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) al que pertenece Cristina Andreu, doctora en Psicología forense, acaba de recibir una petición del test de la verdad desde la Audiencia de Pontevedra para practicarlo a un sospechoso en el caso de una mujer desaparecida en la provincia gallega. Andreu defiende que las pruebas de la memoria del potencial evocado con la P300 y P400 van a convertir al centro aragonés de la DGA en un referente en toda España.


Cristina Andreu detalla que van a poner en marcha en breve un ensayo que realizarán con voluntarios y el Grupo de Homicidios de la Policía sobre sucesos en los que ella trabajará "a ciegas" para poder mejorar los resultados de las pruebas ya realizadas.


Al ver que estos días la Policía Nacional vuelve a buscar a Marta Castillo en unos pozos cerca de una escombrera en Sevilla, la doctora en Psicología recuerda los resultados de la prueba P300 que hicieron a Miguel Carcaño en el Servet. "Hay que mejorar porque puede haber errores en los estímulos que se aplican, el potencial o bien en la misma búsqueda de la víctima", reconoce Andreu.


La responsable de Psicología forense en el IMLAdesvela que ha realizado un estudio inédito en España sobre 68 homicidios en todo el país, en el que ha llegado a la conclusión de que se abandona a las víctimas a una media de 23 kilómetros de distancia del lugar del crimen. Pero si la relación entre el asesino y la víctima es de esposo o amante, esa distancia puede ser hasta el doble. Asimismo, el uso de las máquinas cedidas por Neuronik puede ampliarse a las pruebas de simulación como pericial para valorar los efectos reales de una incapacidad en un perjudicado en un accidente de tráfico, por ejemplo, para tener datos objetivos.