Fútbol 1-Oposiciones 0

La jornada se desarrolló con normalidad: hubo menos opositores de los que se esperaban y su llegada a las facultades se produjo de manera fluida y escalonada desde las 8.30.

Los opositores de enfermería fueron ayer madrugadores. Los más tempraneros comenzaron a llegar a las diferentes facultades de los campus universitarios hacia las 8.30 de la mañana y su llegada fue continua y paulatina hasta minutos antes de las 10.00, hora fijada para que dieran comienzo los exámenes.


Por suerte, no concurrieron todos los que estaban inscritos (12.336 personas) y los 7.195 que sí se presentaron optaron por transportes alternativos al tranvía porque de otra forma, las aglomeraciones que se registraron en las estaciones (sobre todo entre 8.30 y 9.30 de la mañana y a la salida de las pruebas de selección: entre 12.00 y 13.00) hubieran sido mucho mayores.


Al requerimiento hecho por el sindicato Satse la semana pasada para que se ampliaran los horarios de los autobuses urbanos y el tranvía, dado el volumen de opositores que se esperaba, el Ayuntamiento contestó que no lo consideraba necesario, puesto que el servicio había sido ya reforzado con motivo de la campaña navideña y las aperturas dominicales de los comercios durante el mes de diciembre y parte de enero. Efectivamente, los paneles informativos del tranvía recordaban ayer que la frecuencia de los convoyes mejoraba durante el domingo y se reducían las esperas entre las 11.30 y las 22.15 (pasando de 15 a 10 minutos) y entre las 18.45 y las 19.05 (lapso en el que circularon cada 5 minutos). Es decir, que el refuerzo coincidió con la apertura de los comercios y la salida del fútbol (sobre todo) y solo agilizó algo el traslado de opositores al término de las pruebas.


En cualquier caso, no se notaron especiales problemas de movilidad. Hubo algunos atascos en la parada del tranvía del campus de Río Ebro, en el Actur; y en este mismo lugar, en los accesos a la carretera desde los aparcamientos del centro universitario.


Por lo demás, la jornada de oposiciones se desarrolló con normalidad. Los delegados de los sindicatos CSI-F y Satse se emplearon a fondo en su afán por facilitar la llegada puntual y sin despistes de los opositores a sus respectivas aulas de examen y se colocaron tanto a las entradas de los campus como en cada una de las facultades para informar sobre la ubicación de las facultades. En este sentido, hubo alguna carrera en el campus de San Francisco de opositores que desconocían dónde estaba la Facultad de Medicina.