"La gente ha respondido ante la calidad de las pistas y el sol. Los aficionados, a pesar de que no está todo abierto, están contentos disfrutando de la nieve y las terrazas", aseguró Antonio Gericó, director de Formigal, quien confía en que las cifras de gran afluencia se mantengan hasta Reyes. "Aunque hay clientes que vuelven a sus lugares de origen, también está habiendo entradas para el puente, aficionados que se quedarán hasta el martes", relató.

También en Astún confían en que se mantenga la buena afluencia hasta el final de las vacaciones. "Hoy (por ayer) ha sido mejor que el viernes", señaló el director comercial, Andrés Pita, quien informó de que a las 10.45 tuvieron que cerrar el acceso a la estación desde la frontera porque no cabía ni un coche más. "Estamos encantados, contentísimos", dijo, y añadió que "desde la última nevada todo ha ido muy bien. Habrá que esperar a los próximos días, pero puede que sean las mejores Navidades de los últimos años", sentenció.

También Cerler recomendaba a los aficionados estacionar en la base de la estación ya que el aparcamiento del Ampriu estaba a rebosar a mediodía. "La apertura de la zona de Rincón del Cielo ha descongestionado Cota 2.000, los esquiadores se han repartido más", describió Jaime Río, responsable comercial, quien aseguró que la afluencia fue buena. El sol reinante se dejó sentir en las terrazas, repletas de aficionados, mientras en el complejo continúan trabajando para abrir más kilómetros en los próximos días.

Las terrazas de Candanchú, sobre todo la de Pista Grande, también estuvo completa ayer, así como el parquin, que a las diez de la mañana ya tenía colgado el cartel de completo.