La reforma de la iglesia de Híjar, a punto de acabar, pondrá fin a 7 años de cierre al culto
Los vecinos confían en que el templo pueda albergar las celebraciones multitudinarias de Semana Santa en 2015
Las obras se adjudicaron por 759.484,11 euros a Rafael Gómez Galdón S. L., una empresa de Socuéllamos (Ciudad Real). Se trata de una de las firmas especialistas en el sector y muy conocida en el territorio porque ya se encargó de la reforma de la iglesia de la vecina localidad de Samper de Calanda. La financiación procede del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE). Concretamente, de la partida correspondiente a 2012 se destinaron 300.000 euros y el resto, 389.000, se incluyeron en el del año 2013, en el apartado de Infraestructuras Turísticas. El 10% del importe total corre a cargo del Arzobispado de Zaragoza.
"Un edificio Bien de Interés Cultural no permite caprichos", dijo la arquitecta del proyecto, Alicia Torres, del Estudio de Arquitectura Laredo Torres. Destacó que la empresa, que ha contado con personal de la zona, ha debido superar una serie de imprevistos, si bien estos no supondrán retrasos.
El esfuerzo extra se ha centrado en solventar el riesgo de estabilidad de la cubierta de la nave principal, ya que el movimiento de las cerchas provocó los desprendimientos de cascotes. Estas habían perdido su estabilidad y algunas habían reventado. Ahora, se han encamisado e impermeabilizado las bóvedas y cúpulas y el exterior se ha revestido con fábrica de ladrillo acorde al original en las partes más dañadas.
"No había xilófagos en la madera, pero se ha aplicado un tratamiento para prevenir su aparición en un futuro", valoró Torres. También se ha reforzado la consistencia del cerro sobre el que se asienta el edificio para terminar con los desprendimientos de rocas sobre los patios de dos casas aledañas.
El belén que recrea la localidad de Híjar en miniatura y que preparan cada año los voluntarios de la parroquia también ha pasado por varias ubicaciones. De hecho, esta Navidad es la última que permanecerá en la Casa del Hijarano antes de regresar a la iglesia de Santa María La Mayor.