TRAGEDIA EN BARAJAS

Zapatero garantiza rigor en la identificación de los cadáveres y pide paciencia a las familias

El presidente no descarta una subcomisión de seguridad aérea, como reclama Rajoy. Los forenses establecen la filiación de 119 de las 154 víctimas del accidente y empiezan a practicar pruebas dentales a los restantes

El presidente del Gobierno aseguró ayer que el equipo de forenses trabaja "con el máximo rigor y diligencia" en las identificaciones de las víctimas del accidente del avión de Spanair de hace una semana. José Luis Rodríguez Zapatero dijo ser consciente de que las familias de los fallecidos cuya identidad aún no se ha determinado atraviesan un momento "durísimo", pero reclamó "paciencia" para que los expertos concluyan su labor. Hasta la tarde de ayer, se había establecido la filiación de 119 cuerpos sin vida.


Zapatero respondió a las exigencias de "celeridad" planteadas por Mariano Rajoy para la identificación de las víctimas del avión de Spanair con un llamamiento a la mesura. Sostuvo que, con ser importante la diligencia en esos trámites, es más relevante que todos los cadáveres tengan su nombre y apellido sin errores. El jefe del Ejecutivo garantizó que los forenses desempeñan su labor con rigor y con la máxima celeridad posible. Subrayó, además, que estos profesionales son "los primeros" interesados en que las familias reciban cuanto antes los restos de sus seres queridos una vez que se establezca su correcta filiación.


Los expertos trabajan a jornada completa para poner nombre a los 35 cuerpos que continúan sin identificar, pero la tarea no es sencilla. El estado de los cuerpos o de estos últimos restos es "deplorable", según indicaron fuentes conocedoras de los trabajos. Métodos como analizar la saliva o los restos de las ropas de los cadáveres que se emplearon en un primer momento no sirven con los cuerpos que aún quedan por filiar y se ha empezado a practicar pruebas dentales. El resultado es que el proceso avanza ahora a cuentagotas.


Reunión


La directora de Protección Civil, Pilar Gallego, y un responsable de la Policía Forense se reunieron ayer con el centenar de familiares que continúan alojados en el hotel Auditorium de Madrid a la espera de noticias para explicarles los motivos por los que el ritmo de identificación se ha frenado.


Para los allegados a las víctimas fue un mazazo la nueva dilación. Muchos llevan alojados en este hotel cercano al aeropuerto desde el mismo día del accidente sin saber cuándo se podrán llevar los restos de sus seres queridos.


Los forenses cuentan ahora con la colaboración del equipo de identificación de catástrofes de la Guardia Civil para efectuar las pruebas odontológicas. Esta fórmula, sin embargo, es muy dolorosa para las familias, que se ven en el trance de solicitar a los dentistas que les remitan las fichas de sus parientes fallecidos para entregarlas en el cementerio de la Almudena, donde se desarrollan los trabajos identificativos. "No sé si voy a poder aguantar esto", comentó compungido Vicente Fernández, que perdió a su mujer y su hermana en el siniestro.


Los más difíciles


Las víctimas extranjeras y el niño adoptado serán los fallecidos más difíciles de identificar, según indicó Juan Morillo, alcalde del municipio jienense de La Guardia, a la salida del hotel tras participar en la reunión con Protección Civil y la Policía. Morillo era amigo de un matrimonio que falleció junto a su hija de seis años y que aún no ha sido identificado.


Entre los fallecidos sin identificar hay un menor adoptado del que no hay muestras de referencia con las que cotejar porque se desconoce la identidad de la familia biológica del niño. Fuentes policiales aventuran la posibilidad de que haya otras dos menores de origen guatemalteco adoptadas entre las víctimas y de las que tampoco se cuenta con material genético para comparar con las muestras de las dos adolescentes.


El juez de instrucción número 11 de Madrid, Javier Pérez, se ha involucrado en agilizar la entrega de los cadáveres y pasa la mayor parte del tiempo en las instalaciones del cementerio de la Almudena para formalizar los trámites legales.


Zapatero, durante una visita a Galicia, también atendió el requerimiento del líder de la oposición para constituir en el Congreso una subcomisión de seguridad aérea en España. Se declaró "abierto" a estudiar esa posibilidad, pero recordó que la comisión de investigación de accidentes aéreos, dependiente de Fomento, "ha funcionado siempre" y ha resuelto de forma satisfactoria todos los siniestros que ha estudiado. En esta ocasión, agregó, no va a ser distinto y "sin ninguna duda con el tiempo y el trabajo" necesarios se podrán determinar "las causas y las circunstancias" del accidente del 20 de agosto en Barajas.