INVENTOS

Vilanova i la Geltrú contradice a Unamuno

Pep Torres, director de la feria de ideas y creaciones en la localidad barcelonesa, defiende, a diferencia del escritor español, que todos somos inventores.

Todos somos inventores, aunque aún no lo sepamos". Lo dice Pep Torres, director de Attic, feria de ideas y creaciones. Para demostrarlo pone tres ejemplos: "Ponemos pinzas de ropa desmontadas para calzar una mesa que cojea, usamos el alambre de un clip para pulsar botones minúsculos o doblamos un papel para evitar la apertura de una puerta del armario que no cierra bien".

"Cada día inventamos algo nuevo resolviendo nuestros problemas cotidianos con ingenio y chispa. Es lógico, somos humanos", dice.

"Y es parte de nuestra naturaleza humana resolver retos, añade, ya que no existe un muro que separe a quien es o no inventor". Con esta filosofía se celebra este fin de semana la feria Attic de inventos en Vilanova i la Geltrú (Barcelona).

Y es que la famosa frase de Unamuno "¡Que inventen ellos!" queda ya muy trasnochada. "La vida es difícil y a veces son nuestros propios sueños quienes se nos revelan y nos piden su oportunidad", dice Torres. "Si sale, es posible que no solo cambies definitivamente tu vida, sino también la de otras muchas personas a quienes posiblemente nunca conocerás, pero que cada día que usen tu idea agradecerán en voz alta que por una vez hicieras caso a tu corazón". Ese es el espíritu que lleva a los inventores a desarrollar diferentes tipo de aparatos, algunos son útiles, otros parecen menos prácticos y unos terceros resultan auténticas locuras, o quién sabe, puede que sean diseños revolucionarios y adelantados a su tiempo.

En la feria hay ideas de todo tipo, desde toldos fotovoltaicos, bisagras antipilladas de dedos, bicicletas acuáticas o teléfonos anticorrupción (muy apropiados para el momento que vive Cataluña).

Todo es muy cotidiano, como verse tendiendo la colada y no tener las pinzas a mano. Antonio Cano Trapero le da solución a este gran problema de la humanidad con un soporte, formado por un elemento rígido con el volante necesario para permitir la fijación de las pinzas de forma ordenada.

Francisco Chaparro y Juan José López ponen el acento en el sol. Chaparro ofrece respuesta a un galimatías bastante habitual, sobre todo ahora en verano: el reflejo de los rayos solares cuando leemos. Para ellos ha ideado un paraguas para libros. Es un complemento que evita que al leer en exteriores las páginas reflejen los rayos solares a los ojos ayudando así a una lectura cómoda y prolongada. El invento de Juan José López también tapa el sol, pues se trata de un toldo, pero que es fotovoltaico, por tanto no solo protege del astro rey, sino que además absorbe su energía.

Seguridad y carretera

Antonio Soriano, en cambio, está más preocupado por la seguridad vial. Presenta el dispositivo SAS, aunque en realidad debería llamarse SOS, porque consiste en un aparato que abre las fijaciones de los cinturones del coche en caso de accidente. Los desbloquea para que las personas atrapadas por el siniestro, presas del pánico, puedan salir con mayor facilidad del vehículo.

La propuesta de Fernando Solanellas también tiene que ver con el tráfico, en este caso del de dos ruedas. ¿No sabes dónde meter los papeles de la moto? Solanellas da la solución: el casco con compartimento. La creación de Iker Bereciartua también podría servir para ir en moto. Se trata de un jersey-bandolera. Es una prenda de vestir de manga larga, en forma de jersey, capacitada para ser transformada en bandolera o bolsa para pequeños objetos.