Un acusado de violar a su hijastra dice que la relación fue consentida y ella lo admite

Un hombre acusado de violar a su hijastra ha afirmado hoy que practicaba relaciones sexuales con esta última "de forma consentida", afirmación que ha sido corroborada por la víctima, si bien el fiscal ha mantenido su acusación de pena de prisión al considerar que la joven podría estar coaccionada.

El juicio por esta causa se ha celebrado en la Audiencia de Alicante y ha quedado visto para sentencia, después de que el fiscal elevara a definitivas su calificación inicial, 15 años de prisión por un delito de agresión sexual y con el agravante de parentesco, y otra de un año por violencia en el ámbito familiar.

El acusado, O.K., de origen ucraniano aunque residente en Alicante, ha explicado al tribunal que mantenía relaciones sexuales con la víctima de forma consentida tanto en la etapa en la que ambos residían en Ucrania como cuando ya residían en España.

El procesado ha señalado que en la noche del 22 de enero de 2007 él y su hijastra cenaron en el domicilio familiar, donde convivían con la madre de la chica y esposa del acusado, y el hijo que este matrimonio tenía en común, aunque en ese momento estos últimos no se encontraban en casa.

En la cena, durante la que bebieron alcohol, el procesado preguntó a la joven si "tenía algún otro amante", ya que hacia unos días que había regresado de unas vacaciones en Ucrania y sospechaba que allí había estado con otro chico.

La hijastra se negó a responder a esas preguntas y se inició una fuerte discusión entre ambos.

Tras unos momentos de tensión, la chica fue a darse una ducha y, cuando salió, el acusado prosiguió con los gritos, por lo que ella "abrió la puerta y salió al rellano" del edificio para que el hombre se calmara, ha manifestado.

En ese momento, se inició un forcejeo entre ambos y seguidamente el padrastro cogió a la chica para que volviera a entrar al domicilio, "algo a lo que ella accedió cuando comprobó que había vecinos mirando", quienes habían salido a la escalera alertados por los gritos.

La joven volvió a darse una ducha y se metió a su habitación, lugar donde unos minutos después entró el acusado y se metió en la cama de la víctima, donde acabaron manteniendo "relaciones sexuales" "totalmente consentidas", según ha declarado el procesado.

Al día siguiente, la joven fue al hospital para curarse una herida que se había hecho en la mano, lugar donde denunció que había sufrido una agresión sexual "instigada por su madre", a la que había llamado para contarle lo que había pasado.

La hijastra ha corroborado completamente la versión explicada por el acusado y ha destacado que interpuso la denuncia "para darle un susto" al procesado y para que le dieran la "pastilla del día después porque tenía miedo de quedarse embarazada".

Asimismo, ha precisado que las heridas que presentaba podían deberse a otra relación sexual, ya que había mantenido encuentros sexuales con otro chico el día anterior de estar con su padrastro.

Los forenses que atendieron a la joven han manifestado que la chica tenía "heridas sangrantes y agudas ejercidas con violencia que eran compatibles con una relación sexual muy reciente".

Por estos hechos, el fiscal ha solicitado una pena de 15 años por un delito de agresión sexual y de un año por violencia en el ámbito familiar, ya que ha considerado que la joven "podría estar coaccionada" para cambiar su declaración.

Por su parte, la defensa ha solicitado la libre absolución por el delito de agresión sexual y una pena de seis meses, con el atenuante de arrebato, por la violencia en el ámbito familiar.