Tres personas fallecieron en Valencia en dos incendios registrados en sendas viviendas. Una de las víctimas fue un anciano de 80 años en la localidad valenciana de Xàtiva y otras dos, un matrimonio, en la localidad alicantina de Benidorm.

El primer siniestro tuvo lugar sobre las 01:25 horas en Benidorm y nada pudieron hacer los bomberos ni los especialistas de la unidad del Soporte Vital Básico enviada por el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) para salvar la vida de la pareja, que murió carbonizada en un tercer piso del número 32 de la Avenida Ametla de Mar, que ha quedado destrozado tras el incendio. Las circunstancias del siniestro están siendo investigadas, así como la identidad de las víctimas, que aún no ha podido ser esclarecida.

También se desconocen las circunstancias que rodearon la muerte de un anciano de 80 años en la ciudad de Xàtiva. Falleció en un incendio declarado en su vivienda, sita en la calle Grupo Santas. Además, como consecuencia del siniestro, dos hombres de 53 y 63 años y una joven de 22 resultaron intoxicados por inhalación de humo, por lo que fueron trasladados al hospital Luís Alcanyís de la capital de La Costera.

Además, otro hombre de 64 años tuvo que ser atendido tras sufrir una crisis de ansiedad. Una unidad del Servicio de Atención Médica, otra dotación del Soporte Vital Básico y un Transporte No Asistido acudieron al lugar de los hechos para atender a las víctimas, cuya evolución hospitalaria es favorable.

Aunque sin víctimas mortales, este domingo también amaneció con otro incendio en Alcoy (Alicante), donde dos mujeres de 26 y 45 años sufrieron una intoxicación por humo en la vivienda donde tuvo lugar el suceso sobre las 5:25 horas, sita en la calle Sana Lucía.

Ambas fueron atendidas en el hospital Virgen de los Lirios del municipio.

Una cifra récord

En los últimos 36 días han muerto 13 personas en la Comunidad Valenciana debido a incendios, la mayoría registrados por cortocircuitos y problemas con las estufas, ya que la región está padeciendo temperaturas muy bajas en comparación con otros años, lo que incrementa el número de incidentes.

La provincia de Valencia ha sido la más castigada, con siete personas fallecidas en seis siniestros, mientras que en Alicante han muerto seis personas en cuatro incendios.

El 7 de diciembre murió un anciano de 86 años en Crevillente (Alicante) y siete días después fallecía un matrimonio de 82 años en El Puig (Valencia). Ese mismo día también perdía la vida en el incendio de la localidad alicantina de Elche una mujer de 80 años, mientras su marido quedó ingresado grave tras el fuego originado por una estufa en su domicilio.

Tres días después, en Ador (Valencia), un niño de siete años fallecía en su propia habitación, que se prendió fuego debido a la estufa con la que dormía por primera vez.

El día 20 fue una mujer de 64 años la que falleció en el incendio de su vivienda en el barrio valenciano de Patraix y, dos días después, un matrimonio extranjero perdía la vida en su apartamento alicantino de San Juan.

Dos días antes de Navidad, los bomberos rescataron el cadáver de una persona del interior de una vivienda abandonada en la localidad valenciana de Puerto de Sagunto y este mismo sábado falleció en Mislata un bebé de tres meses que su madre sostenía por la ventana para que no inhalara el humo, dejándolo caer al vacío desde un quinto piso tras sufrir un desmayo. Ella y su madre se recuperan favorablemente en el hospital La Fe de Valencia.