CRÓNICA SOCIAL

Tiñendo espero

Sara Montiel fue ayer la gran ausente de la inauguración de una peluquería en Zaragoza, a la que sí acudió su fan nº 1, Ruphert.

Ruphert (izquierda), ayer, junto al también peluquero Ángel Irache.
Tiñendo espero
OLIVER DUCH

Con rulos y sin Sara. Unas décimas de fiebre dejaron en la habitación del hotel a Sara Montiel, quien ayer era la invitada de honor de la nueva peluquería del zaragozano Ángel Irache. Aun así el estilista, que ya contó con la presencia de Montiel en otra ocasión anterior, no estuvo solo, porque le acompañó otra cara conocida, la del también peluquero Ruphert. A ambos les une su profunda admiración por la de Campo de Criptana que fue, además, quien los presentó en su último cumpleaños, celebrado en febrero.


Ruphert, en plan 'Lluvia de estrellas', emergió de entre la densa niebla de ayer en Zaragoza, vestido con un conjunto de chaqueta, camisa y corbata en tonos malva.


"Yo empecé en esto de la peluquería muy joven, con apenas 8 años, y Sara es la persona más importante que ha pasado por mis manos. Es como un amuleto. Cuando la peino, transpiro de la emoción", dijo Ruphert, quien cosidera un peinado en forma de corona ("porque es una reina") que le hizo a la cantante de 'Fumando espero' como el más importante de su vida. Ruphert no paraba de ensalzar las virtudes de Saritísima, cuya imagen en una gran fotografía y su autógrafo presiden la nueva peluquería. Con eso se tuvieron que conformar las numerosas clientas que atestaron ayer el local de la calle Vicente Berdusán.


Para Ángel Irache, "Sara es la musa de muchos artistas". Ruphert recordó que peinó por primera vez a Sara Montiel a los 17 años ("con ella aprendí a ser peluquero") y sostuvo que la manchega (como él), "es fácil de peinar porque es guapa". Ahora, Ruphert se lamenta de que en lugar de estrellas como Sara sean referencia personajes tipo Belén Esteban.


El peluquero, que se confesó un profundo devoto de la Virgen del Pilar ("vengo casi todos los meses a verla", dijo), no se quedó, sin embargo, sin compartir un rato con su admirada Sara.


Irache contó que la estrella seguramente se animaría para compartir una cena con ellos en un céntrico local de la capital aragonesa.