Generación Fortnite: el juego de moda entre los adolescentes

Es gratuito, se puede jugar en varios soportes y con cualquier persona del mundo. Estas son algunas de las claves del éxito del juego del que todos los jóvenes hablan.

David Royo y Quique Rodríguez.
Generación Fortnite: el juego de moda entre los adolescentes
Izaskun Gabás

El pasado 15 de julio, el jugador francés Antoine Griezmann celebró el tanto que marcó en la Copa del Mundo de Rusia al más puro estilo Fortnite. Un particular modo de celebrar cada uno de sus goles que viene haciendo desde hace varios meses en su selección y en el Atlético de Madrid. El baile en cuestión se llama ‘Take the L’, y forma parte del título de Epic Games que se ha convertido en un fenómeno mundial.

El popular videojuego cuenta con más de 45 millones de jugadores en todo el mundo, muchos de ellos aragoneses. ¿Sus claves? Es gratuito, se puede jugar en consola, en móvil o en PC, y te permite jugar con cualquier persona del mundo, siempre y cuando tenga acceso a internet. En la actualidad son cientos los youtubers que se dedican a subir a las redes contenidos prácticos sobre este juego que se ha extendido como la espuma en tan solo unos meses.

Sin ir más lejos, en Calanda prácticamente no hay un niño de entre 11 y 16 años que no juegue al Fortnite. Existen dos modalidades de juego, el modo historia –en el que los gamers deben de salvar al mundo de un ataque zombie- y el ‘Battle Royal’, la versión gratuita del juego, en el cual el objetivo no es otro que sobrevivir.

“El juego se basa en conseguir armas lo antes posible para que no te maten, construir refugios y tratar de convertirte en el último superviviente”, explica David Royo, vecino de Calanda de 12 años. Además, se puede jugar en modalidad individual, contra otros 100 jugadores, o en equipos de dos, o más personas. Estos últimos se llaman escuadrones. Royo juega con su Nintendo, mientras que Quique Rodríguez, de 13 se decanta alterna entre la Nintendo y la Play Station 4.

“Empecé hace tres meses porque me habló de él un amigo, ahora casi todos los niños de 10 a 16 años de Calanda lo conocen y juegan”, asevera. Otro de los factores más atractivos del videojuego es la agilidad ya que cada partida tan solo dura media hora como máximo. “Nosotros nos movemos sobre un mapa, y puedes ir por una zona y otra, hasta que va pasando el tiempo y quedan menos jugadores. Entonces el juego te obliga a acercarte al resto de supervivientes hasta que solo queda uno”, explica Royo, con una pasión arrolladora.

En opinión de los jóvenes, lo mejor del videojuego es la autonomía. “Tú decides recolectar materiales de un tipo u otro y hacer las construcciones que te interesen, también puedes elegir hasta 5 armas de las que te vas encontrando a lo largo del juego”, añade.

Además, el juego les permite interactuar con otros usuarios, con los que se comunican por teclado o por micrófono mientras se desarrolla la partida. “Esta misma tarde he hecho dos nuevos amigos de España y hemos jugado una partida”, asegura el joven, que explica que incluso ha llegado a jugar con un niño de China. “Yo no lo entendía, solo le oía quejarse cuando le disparaban”, recuerda.

Por su parte, Rodríguez destaca los escenarios que van variando cada mes y con el cambio de temporadas: ahora se encuentran en la quinta. “El juego comienza cayendo desde un paracaídas, y puedes elegir dónde, un tejado, una casa, un socavón. Es muy importante tener suerte y que no caigas en un lugar donde haya muchos jugadores al mismo tiempo”, explica.

Además, el récord mundial lo tiene un joven, denominado Elemental_Ray en el juego, que aglutinó 48 muertes (sobre los 100 jugadores que hay en cada partida). Por su parte, Royo asegura que ha jugado más de 60 horas en tan solo dos meses. “Yo alguna más, pero porque empecé antes”, añade su compañero. De media, “y porque es verano”, indican, juegan un par de horas al día. “El resto del tiempo vamos a la piscina o hacemos deporte”, aseveran.

El ‘boom’ de este juego se suma a la reciente alarma vertida por especialistas de todo el mundo sobre el peligro de la adicción a estos productos, reconocida este año por la OMS como una enfermedad. También desde el colectivo docente, que advierte que, debido a la posibilidad de jugar desde el teléfono móvil, existen casos de jóvenes que lo utilizan en clase por lo Epic Games añadió hace un par de meses el mensaje ‘Mr. Hillman dice: deja de jugar en clase’, que aparece en la pantalla de carga cuando se inicia el juego.

“Un juego controlado”

Tal ha sido la repercusión del juego, que el pasado mes de abril dos jóvenes decidieron iniciar una campaña en la plataforma Change.org pidiendo que se retirase el juego por la adicción que, alegan, produce este juego: “Veo que el juego puede quitarle tiempo a la familia y creo es esto es un problema”, aseguran en el texto. En la actualidad han superado las 8.000 firmas.

Durante el curso la videoconsola pasa a ser un entretenimiento de fin de semana. “Lo primero es lo primero. En casa tratamos de controlar bastante el tiempo que dedica a la videoconsola porque por ellos estarían todo el día”, asegura Olivia Campoy, madre de David. “En verano, por ejemplo, solo se juega después de comer y alguna noche si no pueden salir porque hace mal tiempo”, añade.

Sobre la temática del juego, Campoy asegura que no le gusta nada “eso de que tengan que ir matando gente”. Sin embargo, reconoce que “hoy en día casi todos los juegos tratan de eso. Al menos tienen que usar la imaginación y habilidades como la estrategia”, reflexiona.

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