FIN DE LA PANDEMIA

Sin casos de gripe A en Aragón desde hace al menos dos meses

Todos los virus identificados en España en las últimas semanas son del tipo B, aunque la vacuna de este invierno incluirá la variante N1H1

Sembró una alarma casi sin precedentes. La llamada gripe A (oficialmente H1N1) hacía su escalada en pleno verano, hace ahora un año, acompañada de estrategias para reducir a lo mínimo posible su expansión. Ahora parece haberse esfumado. De hecho, la Organización Mundial de la Salud anunció ayer el fin de la pandemia. El Instituto de Salud Carlos III ha notificado en su último boletín epidemiológico -correspondiente a la semana del 9 de agosto- que no hay rastro de la gripe A en ninguna Comunidad desde hace dos semanas. Solo Galicia y Castilla y León han notificado algunos casos durante junio y julio. Todos los virus detectados actualmente son de una vieja conocida, la gripe B, a la que se le da mucha menos importancia.


Aragón no es una excepción y hace meses que la red oficial de vigilancia no detecta apenas casos de gripe en la Comunidad, ni del tipo A ni de ningún otro. El pico de la enfermedad se alcanzó entre octubre y noviembre del año pasado, y enero de 2010 arrancó ya con muy pocos afectados. Así ha seguido durante el resto del año, cuando se han detectado algunos casos, sobre todo en marzo y abril, pero aislados.


Nada que ver con lo que pasaba, por ejemplo, hace un año. En la semana del 16 al 22 de agosto, la tasa de incidencia de la enfermedad era de 39,48 afectados por cada 100.000 personas en Aragón, algo nada habitual en los meses de calor. Sin embargo, en las últimas semanas no hay ni un solo caso notificado en ninguna de las tres provincias y la tasa es cero. Es más, la última vez que la red aisló un virus de la gripe en la Comunidad fue en la primera semana del año (al margen de que sí que se haya detectado algún enfermo en los meses siguientes).


"Hemos vuelto a la normalidad", afirma el jefe de servicio de Vigilancia en Salud Pública del Gobierno de Aragón, Juan Pablo Alonso. "No era normal que hubiese tantos casos en verano, porque la gripe, sea del tipo que sea, se beneficia del frío para avanzar, y los casos en pleno calor son aislados", reconoce Alonso.


Por si acaso, Salud Pública ha mantenido activa este verano su red centinela. Es el tercer estío que lo hace. A través de este servicio, varios médicos de familia derivan muestras de pacientes que parecen afectados por gripe al laboratorio, y allí se detecta si efectivamente tienen la enfermedad y qué cepa del virus la causó.


Estos datos se recogen, de manera excepcional, desde hace 9 semanas y vienen a ratificar la tesis de que, al menos de momento, la gripe A se ha desvanecido. En todo este tiempo, solo se han detectado tres casos de gripe, uno en junio y dos en julio. No obstante, los epidemiólogos no cantan victoria. "De momento no se están aislando virus del tipo A H1N1, pero no se puede decir que este invierno no vayan a detectarse porque el comportamiento de la gripe es imprevisible", explica Alonso.


Muchos de los países en los que hay gripe actualmente están padeciendo la causada por el tipo B y por otra vieja conocida, la A H3N2. Otras zonas, como Australia o Sudamérica, aún tienen predominios de la A H1N1, pero la epidemia no está resultando especialmente agresiva. "A nivel nacional está habiendo pocos aislamientos, y todos pertenecen a la gripe B. Todos estos datos nos hacen esperar una temporada de gripe completamente normal, aunque insisto en que es mejor no adelantar acontecimientos", asegura Alonso.


Aún es pronto para conocer cuándo y cómo se desarrollará la campaña de vacunación contra la gripe de este invierno (la del año pasado se adelantó). Lo que sí que se da por seguro es que la 'dosis' incluirá la variante A H1N1. "Está dentro de lo normal. Todos los años, la vacuna es trivalente, y la de este año incluirá este virus y también los otros dos que están circulando, el A H3N2 y el B", explican desde Salud Pública.