SOLIDARIDAD

Robin Hood sale del bosque

Intermón Oxfam representó ayer la historia medieval para llamar la atención sobre el recorte de fondos para ONG.

Robin Hood, ayer, con el arco y las flechas, en la plaza de España de Zaragoza, ante la DPZ. Y el gobernante, parado. Por si acaso.
Robin Hood sale del bosque
ESTHER CASAS

La historia lo sitúa en los bosques de Sherwood. Pero las circunstancias han cambiado. El propio Robin Hood ha tenido que abandonar el arbolado por el frío asfalto de la ciudad. Ayer, dejó la campiña inglesa para empaparse del cierzo zaragozano. Y, como acostumbra, lo hizo por un noble fin. Esta vez su misión no era robar a los ricos -quizá, porque de esos quedan ya pocos- para dárselo a los pobres, sino llamar la atención para que los necesitados no lo sean tanto. Solidario sigue siendo el personaje. Sus flechas tenían ayer un destinatario claro: el Gobierno del país y, en concreto, su intención de recortar 800 millones de euros en las partidas destinadas a las ONG. Así que este héroe medieval se apostó a mediodía de ayer delante de la Diputación Provincial de Zaragoza para protestar contra la medida. El propio presidente de la institución, Javier Lambán, lo vio a las puertas de la institución... y subió rápido las escaleras. Y eso que ayer el señor Hood venía en son de paz. "Encima -se quejó el arquero-, Aragón es una de las comunidades que menos dedica para ayudas al desarrollo".


Vista su pericia con el arco y las flechas, pronto se demostró que no era el original. No lo interpretaba ayer ni Russel Crowe ni Kevin Costner, sino Manuel Izquierdo, voluntario de Intermón Oxfam, que para eso el acto lo había convocado esta organización. Ataviado a la manera del cuento, se puso serio a la hora de hablar: "Es una forma más de visibilizar nuestras quejas. El cuento que interpretamos tenía una moraleja? y acababa bien. Ese es nuestro fin", declaró. Enfrente de él, Jesús Peiro, otro voluntario de Intermón al que le tocó un rol menos agradecido: el de gobernante. Con unas tijeras gigantes, simulaba el recorte de ayudas. "Mi papel es el contrario: robo a los pobres para dárselo a los ricos. Pero ¡que conste que estoy interpretando! Normalmente soy más sonriente? y no visto así", dejó claro.


Y entre uno y otro, José Miguel Capapé, otro de los responsables de Intermón Oxfam que ayer repartía folletos, también con sombrero a lo Robin Hood. "Es que estamos hasta el gorro de que paguen los de siempre", justificó. Según contó, los presupuestos para ayuda al desarrollo se van a reducir drásticamente, muy lejos del 0,7% ansiado por las ONG. El presupuesto para estas tareas alcanzó el pasado año el 0,51% y la intención del Gobierno es bajarlo al 0,4 para 2011. "No es justo que la crisis la vayan a pagar más duramente los que menos tienen", lamentó Capapé. Según la ONG, esta situación se ha producido porque no han tenido quien los defienda durante la tramitación de los presupuestos. "Ha sido una partida fácil de eliminar", criticó. Menos mal que Robin Hood acudió al rescate. Para emularlo, Intermón ha habilitado una página web, quenopaguenlosdesiempre.org y convertir así a los ciudadanos en improvisados Robin Hood. Para que, como en la historia, el dinero llegue a aquellos que lo necesitan.