Menos sal y más fruta en los colegios

Reducir el consumo de sal y repartir fruta gratis en los colegios son las iniciativas anunciadas por el ministro de Sanidad, Bernat Soria, para reducir la "epidemia" de obesidad que no deja de crecer entre la población española.

Soria ha presentado dos planes dirigidos a lograr este objetivo, durante la inauguración de la III Convención Naos -Estrategia para la Nutrición, la Actividad Física y la Prevención de la Obesidad-, en la que han participado numerosos expertos nacionales e internacionales, con el fin de promover hábitos saludables.

El primero es el Plan de Acción para la Reducción del Consumo de Sal y la Prevención de la Hipertensión Arterial, que persigue alcanzar el ideal marcado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de no tomar más de cinco gramos diarios de sal.

Ésta sería la mejor manera de reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, como la isquémico cardíaca y la cerebro-vascular, que, en la mitad de los casos, se deben a una presión arterial elevada.

El titular de Sanidad ha apuntado que la prevalencia de la hipertensión arterial en la población española se sitúa en torno al 35 por ciento, aunque es más elevada en edades avanzadas.

"En primer lugar queremos conocer el consumo medio de sal en España y sus principales fuentes", ha manifestado Soria, quien ha precisado que se seleccionará una muestra representativa de la población adulta sobre la que se realizarán estudios bioquímicos y análisis de orina.

La elaboración de una encuesta sobre su alimentación y la toma de medidas antropométricas, junto con un estudio en profundidad de los niveles de sodio que contienen los alimentos más comunes en este país son otros pasos de esta investigación, cuyos primeros resultados se conocerán en el segundo semestre de 2009.

Este departamento determinará cuál puede ser la repercusión para la dieta de la modificación de los niveles de sal de esos productos y después se suscribirán acciones intersectoriales con los agentes involucrados en la cadena alimenticia.

A partir de ahí, ha adelantado el ministro, se planificarán nuevas intervenciones para tratar de reducir el consumo de sal de la forma más eficiente.

Pan más soso pero más sano

Soria se ha felicitado del éxito alcanzado con el acuerdo rubricado con los principales fabricantes de pan, por el que han disminuido los niveles de sal ingeridos con este alimento en un 26,4 por ciento.

En la línea de luchar contra el exceso de peso, que afecta a uno de cada cuatro niños en España, Sanidad llevará a cabo en el curso 2009-2010 el programa europeo "Fruta en la Escuela", por el que se repartirán gratis frutas y verduras en los colegios.

Este plan, en el que colaborarán los ministerios de Medio Ambiente y Educación, incluye medidas educativas que reforzarán la importancia de tomar estos alimentos junto con un programa de seguimiento y evaluación que permita, concluida la intervención, analizar su eficacia y proponer su continuidad.

El ministro ha recordado que la prevalencia de la obesidad infantil es del 9,13 por ciento, mientras que el 18,48 por ciento de los menores entre dos y diecisiete años presenta sobrepeso.

Esto tiene una "enorme trascendencia", ha matizado, puesto que predice las enfermedades crónicas asociadas y el aumento de la mortalidad que tendrán en la edad adulta.

Sanidad ampliará el programa educativo PERSEO, del que están a punto de conocerse sus resultados, al resto de las comunidades autónomas, después de ensayarse en cerca de setenta colegios de Canarias, Murcia, Andalucía, Extremadura, Galicia, Castilla y León, Ceuta y Melilla, con la participación de 13.000 niños de entre seis y diez años, además de sus familiares y profesores.

Soria ha hecho hincapié en el riesgo que supone para la salud de los ciudadanos, así como para la viabilidad del Sistema Nacional de Salud, no actuar ante la creciente obesidad.

Esta patología aumenta de manera sustancial el riesgo de padecer diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, ciertos tipos de cáncer y otras enfermedades crónicas prevalentes en nuestra sociedad, ha concluido.