El director de esta orquesta, Lucio De La Cruz, no hace más que estar de de aquí para allá en las distintas poblaciones visitadas por la caravana vede. Tanto en Barbastro como en Ejea y Alcáñiz, su jornada transcurre con sus orejas pegadas al teléfono móvil.

Lucio vive con intensidad la experiencia. Explica que uno de los objetivos principales de la Oficina Verde es la concienciación ambiental de los alumnos de la universidad. “Si sensibilizamos a los estudiantes ahora –explica-, cuando sean profesionales transmitirán y protegerán los buenos valores medioambientales al resto de la sociedad”.

Con respecto a su labor en la caravana, reconoció sentirse muy a gusto en la organización junto con sus compañeros. “A mí me produce mucha satisfacción personal contribuir a cambiar hábitos y poner mi granito”. “pero la caravana –insiste- no es nada sin los voluntarios”. Los alumnos son parte de un equipo cuya labor se ha ido tejiendo y planificando durante meses.

El director de la Oficina Verde manifiesta que la pretensión es asentar su proyecto. “Esta vez –destacó- las actividades no terminan en una semana, sino que se prolongan a lo largo del mes de octubre”. “El compromiso y comportamiento de toda la gente, tanto de los voluntarios como de las localidades a las que llegamos, es fenomenal”, añadió. Y a renglón seguido, suena el móvil. Hay que pensar que este jueves el autobús se acercará a Sabiñánigo. Y la conciencia hay que difundirla todos los días del año.