Los Reyes recibirán el próximo domingo a la primera dama de EE.UU., Michelle Obama, y a su hija Sasha en la residencia veraniega del Palacio de Marivent, en Palma de Mallorca, donde ofrecerán un almuerzo a sus visitantes, que llegaron ayer a España para disfrutar de unos días de descanso en Andalucía.

Aunque se barajó la posibilidad, no es seguro que la breve estancia en Mallorca de la esposa y la hija del presidente Barack Obama incluya un paseo por la bahía de Palma a bordo del yate "Fortuna", la embarcación que hace diez años fue donada a Patrimonio Nacional para uso de la Familia Real por un grupo de empresarios de Baleares, en colaboración con el Gobierno regional.

El Príncipe de Asturias no podrá asistir al encuentro con Michelle Obama porque el sábado representará a España en la toma de posesión del presidente electo colombiano, Juan Manuel Santos, lo que le impedirá asimismo participar ese día, como patrón del "CAM", en la última jornada de competición de la 29 Copa del Rey de Vela, que se celebra desde el pasado lunes en la bahía palmesana.

Don Juan Carlos, que se entrevistó en Washington con el presidente Obama el pasado 17 de febrero, llegará hoy a Mallorca tras despachar por la tarde en el Palacio de la Zarzuela con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

La primera en llegar este verano al Palacio de Marivent fue la Reina, en julio, mientras que Don Felipe llegó a Mallorca el pasado viernes 30 de julio y dos días después lo hizo la Princesa de Asturias con sus dos hijas, las Infantas Leonor y Sofía.

Michelle y su hija Sasha, de nueve años, tienen previsto concluir sus vacaciones en España este domingo, tras su visita a los Reyes en Mallorca, después de disfrutar de cuatro días de descanso en Andalucía alojadas junto a un grupo de amigos en el complejo hotelero de lujo Villa Padierna, en el municipio malagueño de Benahavís.

Desde allí, ayer visitaron el centro histórico de Marbella, en uno de cuyos restaurantes cenaron, y hoy se han acercado a Granada para conocer la Alhambra, la catedral y los populares barrios del Albaicín y el Sacromonte.

El presidente Obama cumplía 49 años precisamente ayer, una fecha que ha celebrado en Chicago sin su familia, ya que, mientras Michelle y Sasha viajaban a España para estos días de descanso, su hija mayor, Malia, se encuentra en un campamento de verano.