Los investigadores encargados de la desaparición de la niña británica Madeleine McCann están molestos con el director de la Policía Judicial portuguesa, Alipio Ribeiro, que admitió que pudo haber precipitación al declarar sospechosos a los padres de la menor.

La prensa lusa recoge declaraciones de miembros de la policía en las que queda patente el enfado y la desmotivación tras las palabras de su máximo responsable, que también ha sido duramente criticado por políticos, jueces, fiscales y predecesores en el cargo.

En una entrevista reciente, Ribeiro reconoció que hubo "una cierta precipitación" en la decisión de declarar sospechosos formales a los McCann y aseguró que, con la perspectiva que da el paso del tiempo y su experiencia como magistrado de la Fiscalía, "tal vez debería haber habido otra valoración".

A raíz de estas afirmaciones, Carlos Pinto de Abreu, uno de los abogados del matrimonio McCann en Portugal, dijo que están analizando la posibilidad de solicitar formalmente que sus clientes dejen de ser considerados sospechosos formales de la desaparición de su hija. Pinto de Abreu dijo que habitualmente habría que esperar a que concluya el plazo de secreto de sumario, que podría prolongarse hasta inicios de 2009, pero que, dadas las circunstancias y el daño a la imagen de Gerry y Kate, podrían presentar esta petición formal ante la Fiscalía General de la República.

El malestar por las declaraciones de Ribeiro se suma a su decisión de apartar del caso al coordinador de la investigación Gonzalo Amaral por sus acusaciones de que la policía británica favorecía a los padres.

Los agentes consideran inaudito que ni siquiera su propio director defienda el trabajo que desarrollan y acusan a su superior de actuar siguiendo motivaciones políticas. Los investigadores consideran que estas declaraciones llegan en el peor momento, cuando la policía lusa se prepara para viajar a Inglaterra para interrogar al matrimonio McCann y las cuatro parejas de amigos con los que cenaban en el sur de Portugal la noche en la que desapareció Madeleine, el 3 de mayo del año pasado.

Por su parte, la Fiscalía General de la República afirmó que la situación procesal de Kate y Gerry será "revaluada en el momento oportuno". Madeleine desapareció la pasada primavera de un apartamento turístico de Playa de la Luz, al sur del país, donde dormía junto a dos hermanos gemelos de 2 años, mientras sus padres y un grupo de amigos británicos cenaban en un restaurante cercano en la misma urbanización.