CAMBIO CLIMÁTICO

Los gases de efecto invernadero están en su nivel más alto, según los meteorólogos

La Unión Europea insta al resto de actores internacionales a que hagan un esfuerzo para lograr un acuerdo vinculante y completo en la cumbre de diciembre de Copenhague

ginebra. La concentración en la atmósfera de los gases causantes del cambio climático sigue aumentando a un ritmo exponencial y ha alcanzado su nivel más alto en más de 250 años, reveló ayer la Organización Meteorológica Mundial (OMM), que reclamó una acción internacional inmediata para atenuar este fenómeno.

A dos semanas de la Conferencia de Copenhague sobre el Cambio Climático (7 y 8 de diciembre), vista por la comunidad científica como una oportunidad crucial para consensuar medidas globales ante el calentamiento del Planeta, la OMM presentó nuevos datos que corroboran "el escenario más pesimista" del Grupo Intergubernamental de expertos sobre Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).

El secretario general de la OMM, Michel Jarraud, explicó que los datos recogidos alrededor del mundo, gracias a 200 estaciones de medición de los gases de efecto invernadero, revelan que su concentración y la elevación de la temperatura media global se ubican en la parte superior de la horquilla pronosticada por el IPCC. "Es muy importante revertir esta tendencia tan rápido como sea posible", subrayó Jarraud, quien dijo que solo así se podrán minimizar las consecuencias del cambio climático.

Al interpretar los datos publicados ayer, el científico reconoció que el mundo está frente a "un aumento exponencial" de los gases de efecto invernadero, especialmente del dióxido de carbono (CO2), que representa el 86% del total de partículas aceleradoras del cambio climático.

Las principales fuentes de CO2 son la quema de combustibles fósiles (sobre todo petróleo y carbón) y la deforestación. Los otros dos gases que tienen un impacto significativo en el cambio climático son el metano, cuyas emisiones proceden del cultivo de arroz, la explotación de combustibles fósiles y los vertederos, entre otros; y el óxido nitroso, que proviene de la utilización de fertilizantes y diversos procesos industriales.

Jarraud instó a los gobiernos a alcanzar un acuerdo significativo en Copenhague, "ya que cuanto más demore una decisión, más graves serán las consecuencias del cambio climático".

Compromisos

Mientras, la Unión Europea (UE) instó ayer al resto de actores internacionales a que hagan un esfuerzo para lograr un acuerdo vinculante y completo en Copenhague, que incluya compromisos específicos de reducción de emisiones y cifras concretas de financiación a países en desarrollo. "Pedimos que exista un acuerdo jurídicamente vinculante", afirmó la ministra española de Medio Ambiente, Elena Espinosa, al término del encuentro con sus homólogos europeos para preparar la cumbre de la ONU de Copenhague.

Por su parte, el ministro sueco de Medio Ambiente, Andreas Calgren, señaló que los países en desarrollo también deben comprometerse a adoptar medidas medioambientales para limitar el crecimiento de sus emisiones. Para motivarles, la UE propone usar como "palanca" la concesión de una financiación pública internacional adelantada para el periodo 2010-2012 de entre 5.000 y 7.000 millones de euros anuales, a la que no ha precisado cuánto aportará.