Los creadores avisan de que las webs de descargas mutarán para burlar la ley

El presidente de la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos, Aldo Olcese, pidió ayer que la Comisión de Propiedad Intelectual pueda interpretar cada denuncia ante el aumento de páginas web mutantes y en el caso de que la Ley de Economía Sostenible -conocida popularmente como Ley Sinde- no sea lo suficientemente "explícita".

Olcese, quien participó ayer en un desayuno organizado por el Foro de la Nueva Cultura, alertó de que "desde que en España se conoce que se va a actuar contra la piratería se están produciendo mutaciones rápidas de páginas de descargas ilegales para poder seguir existiendo sin infringir ninguna norma". "Lo sabemos, lo tenemos detectado y comunicado a las autoridades y esperamos que el reglamento lo recoja para evitar una insuficiencia regulatoria", continuó el presidente de la coalición, quien ha explicado que algunas de estas páginas ilegales de descargas que cambian continuamente dependen de "usuarios muy especializados".

Esquivar a los 'trackers'

Estas mutaciones consisten, generalmente, en esquivar la labor de los llamados 'trackers', que son unas herramientas informáticas del estilo de las que utiliza Google para indexar páginas web. Estos 'trackers', una vez entre la ley en vigor, serán los encargados de rastrear la red e busca de páginas con protocolos bitTorrent o P2P, los que habitualmente se emplean para descargar contenidos. Explicado gráfica y básicamente, los 'trackers' van en busca de determinados elementos que identifican esos protocolos, algo así como la banderas son indicativas de que estamos ante un edificio oficial. Bastaría, por ejemplo, con cambiar esas banderas, para 'despistar' a los 'trackers'.

Ante la posibilidad de que se inicie el juego del ratón y el gato, Olcese pidió que, de no ser concretos en la definición de las medidas, la Comisión de Propiedad Intelectual pueda interpretar cada denuncia. Esta posibilidad, no obstante, genera un rechazo absoluto en las asociaciones y plataformas de usuarios de internet, que ven aún más indefinición en una ley que ya de por sí consideran un grave ataque a la libertad de expresión.

La creación de esta comisión, dependiente del Ministerio de Cultura, es una de las medidas recogidas en la disposición final primera de la Ley de Economía Sostenible.

Su misión será la "mediación, arbitraje y salvaguarda de los derechos de propiedad intelectual", además de recibir las denuncias de entidades de gestión o de particulares que consideren vulnerados sus derechos de autor. En este sentido, Olcese señaló que la ley es "una primera solución a este problema", si bien España y el resto de países europeos se encuentran en "una encrucijada" en la que se mezclan diferentes cuestiones como la directiva europea de propiedad intelectual, la integración y armonización de otras normativas o la profunda división en la sociedad sobre los derechos de autor.

Un 'pacto de buen gobierno'

En su intervención, que fue seguida por la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde y el presidente de la SGAE, Teddy Bautista, entre otras personalidades, Olcese propuso a todos los sectores un pacto de buen gobierno en la red, para conseguir que la regulación sea lo más eficaz posible.

Respecto a la web Wikileaks y las supuestas presiones que Estados Unidos hizo al Gobierno de España para que se aprobara una ley antipiratería, Olcese aseguró que no solo han hablado con el país "más afectado por esta lacra", sino con otras embajadas que supuestamente padecen la piratería en España y con más de veinte diputados como parte de un trabajo "lógico y razonable".

"Es lógico que el Gobierno de Estados Unidos se preocupe por la piratería en España", precisó Olcese, para añadir que "si el resultado de esta presión es que llevamos seis años sin conseguir nada es que realmente el Gobierno estadounidense no tienen mucha fuerza para presionar a España".

Sobre el trabajo de Wikileaks, Olcese lo calificó de "fenómeno social pasajero" y un ejemplo "lamentable de opacidad", al tiempo que consideró que su labor "no corresponde al sentido de ética y transparencia". No obstante, aseguró que no le extrañaría que a su fundador, Julián Assange, le dieran "todo tipo de premios".