HUESCA
Los caballos no desfilan hoy en la procesión de la Enclavación por una tasa
Los tambores, las cornetas y las jotas tomaron de nuevo ayer las calles del Alto Aragón. En Jaca la lluvia acortó el desfile del Silencio.
La procesión de la Enclavación en Huesca saldrá hoy a las 20.30 sin caballos, ya que el recorte de horas extra del Ayuntamiento de Huesca obliga a la cofradía de Santiago a pagar los servicios de la brigada municipal y la junta de la hermandad no puede costearlos. Sin embargo, el Nazareno (23.00) no renunciará a los animales y ha pagado los 144,6 euros de los trabajos de limpieza.
La Semana Santa continuó ayer en la provincia de Huesca, donde los tambores, las cornetas y las jotas resonaron por las calles. En la capital las procesiones corrieron a cargo de la cofradía de Nuestro Señor Atado a la Columna, que partió con cinco minutos de retraso según lo previsto (20.30); y por la de la Preciosísima Sangre, que comenzó como el año pasado con una jota al paso de la Coronación de Espinas.
Todavía no había anochecido cuando los más de 100 cofrades de la primera comitiva enfilaron la calle del Parque, anunciados por la banda de tambores y trompetas, encargada de romper el silencio propio de la Semana Santa junto a la Banda de Huesca. Y la noche llegó con los sonidos folclóricos de la voz de Mari Paz Raya para arropar a la cofradía de la parroquia de San Lorenzo. Desde allí partió la procesión, compuesta por cerca de 70 personas y la representación de las otras. La marcha hizo seis paradas en la ruta para escuchar las jotas.
La provincia desfila
La procesión del Silencio en Jaca inauguró ayer la Semana Santa puesto que el lunes no pudo salir la comitiva prevista por las fuertes lluvias. En este primer contacto, más corto de lo habitual porque el agua irrumpió al principio del recorrido, participaron la Real Hermandad de la Sangre de Cristo, de la que es hermano mayor honorario la Guarnición Militar de Jaca, y, como invitada, la de Nuestra Señora de la Piedad. Este desfile ha tenido este año una novedad: una banda de cornetas, que ha incrementado los tambores y bombos.
En Sariñena, numerosos fieles fueron testigos ayer del estreno de la iluminación de los pasos durante la procesión del Encuentro y disfrutaron de los nuevos toques de la Agrupación local de Tambores y Cornetas. Decenas de vecinos presenciaron ayer el encuentro entre la Virgen María y el Cristo en la plaza del Ayuntamiento.
Por su parte, las mujeres de la cofradía del Descendimiento de Barbastro portaron ayer noche el paso de La Piedad en la procesión del Sexto Dolor de la Virgen.
