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La barra más libre de Rebeca

Rebeca Aguarón ha batido un récord del mundo, el de barra aragonesa, en el último campeonato celebrado en Calatayud.

Rebeca, en plena competición, dispuesta a lanzar la barra.
La barra más libre de Rebeca
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Quién le iba a decir a Rebeca Aguarón que batiría un récord mundial. "Bueno, es el récord de Aragón", cuenta ella, con humildad, para no darse bombo. Pero como la disciplina que practica es la barra aragonesa, y es un deporte tradicional de la Comunidad, se puede considerar que ha logrado la mejor marca del mundo en modalidad femenina. Y ¿cómo lo ha hecho? "Sinceramente -confiesa la atleta aragonesa-, no tengo ni idea".

 

Pero algo tiene que haber detrás para lograr lanzar una barra de más de 4 kilos a una distancia de 14,64 metros, el último récord de la Comunidad, que logró hace solo ocho días en la final del Campeonato de Aragón de este deporte que tuvo lugar en Calatayud. "Solo llevaba un mes entrenando, no tengo tiempo entre el trabajo y el campo. Pero llegué a la tirada muy relajada. Y, cuando acabé, me dije: 'Pues aún estoy fuerte", informa esta joven de Calatorao. Quizá, más que por el entrenamiento de estos últimos días, su logro tiene más que ver con su padre, que le enseñó a practicar y amar este deporte. A ella y a su hermano Sergio, que fue tercero en el campeonato celebrado en Calatayud. "Yo empecé -recuerda Rebeca- de pequeña, recogiéndole las barras a mi hermano. Y no podía ni levantarlas. ¡Las de los chicos pesan más de siete kilos!", informa. No fue hasta 2004 cuando se lo tomó más en serio y comenzó a competir. Actualmente, lo hace en el club El Castilluelo de Urrea de Jalón, pero hay muchos más en Calatorao, Huesca, dos de Teruel o Utebo, "que tienen muy buenos tiradores", comenta.

 

Ya pueden serlo, porque la barra, como todo deporte, tiene sus reglas estrictas y unos jueces que pueden dar al traste con la mejor actuación: "Hay un campo de tiro, dos jueces (uno para mirar los pies y otro para controlar la caída de la barra) y tienes que dar un giro completo en el campo sin pisar la tabla. Además, la barra tiene que caer con la punta recta", informa Rebeca.

 

Hace cinco años, eran pocas las chicas en liza, una situación que ha cambiado gracias al fomento de los Juegos Escolares en los pueblos. "La gente se engancha. Y se pica -cuenta-. Y piensas: '¿pero no podré lanzar la barra más lejos?'. ¡Si parece tan fácil y no lo consigo!". Y Rebeca se ha debido picar muchísimo, porque en 2004 ya fue campeona de Aragón, con una marca de 12,24 metros. Y, en cinco años, se ha superado en casi dos metros y medio. "Creo que acabaré rebasando los quince. Aunque ya soy mayor", dice Rebeca, que solo tiene 25 años. "Vale, soy joven, pero se nota. Antes, podía coger la bici y hacerme 50 kilómetros y, ahora, con tres?", pone como ejemplo.

Un buen ambiente

Así que, para seguir manteniéndose, revela su secreto: la motivación. "La que tenía el récord anterior, Virginia Lahoz, no compitió este año. Y yo siempre quiero que venga. La necesito. Como ella es la que más tira, si logra hacer 10, yo voy a por los 15", explica Rebeca. Y es que, al menos entre las féminas, abunda el buen rollo. Bastante más que entre los chicos. "Ellos tienen sus piques -revela-. Pero nosotras nos conocemos todas y tenemos muy buen ambiente. ¡Menos mal!". A esa buena relación contribuyen los campeonatos, como el de Aragón, que se desarrolla en tres fases: una en Zaragoza, otra en Huesca y otra en Teruel. Gana quien lanza más lejos la barra en cualquiera de las tres convocatorias. Este año, la última era la de Calatayud. Y Rebeca logró su marca el último día, en su última tirada.

 

Un aliciente más para continuar practicando, a pesar de que, como señala Rebeca, "esto no da de comer". Eso sí, ella lo ve como una afición que le reporta muy buenos momentos. Y como una forma de ayudar a que la barra aragonesa no caiga en el olvido. "Como deporte tradicional, cada vez se ve menos. Mientras la sociedad avanza, se pierde todo. Y no me gusta que ocurra eso", concluye. De pequeña, ayudaba a entrenar a su hermano. Hoy, es la campeona de Aragón