MEDIO AMBIENTE

Greenpeace denuncia que los supermercados no contribuyen a una pesca sostenible

A las grandes superficies comerciales de alimentación españolas les preocupa más bien poco de dónde procede el pescado que venden al público y menos aún si ha sido capturado de forma respetuosa con el medio marino. Greenpeace denuncia que, pese a la responsabilidad de los distribuidores en la desaparición de los stocks pesqueros y la destrucción del ecosistema marino, pocos son los supermercados e hipermercados que "aceptan el desafío de abastecerse de productos sostenibles".


A bordo del buque 'Artic Sunrise', llegado a las costas de Cádiz para una jornada de puertas abiertas sobre la devastación de los océanos, la organización presentó este martes 'Una receta para el desastre. El apetito insaciable de los supermercados por los productos pesqueros'. El informe analiza la escasa implicación de los comercios por la venta de pescado sostenible, capturado con técnicas de pesca que puedan ser mantenidas indefinidamente sin agotar los 'stocks' y sin dejar impactos negativos en el ecosistema. Aunque todos 'suspenden' el examen de Greenpeace, los comercios de la cadena Lidl son los que salen mejor parados en el ránquin, mientras que Mercadona se sitúa en el extremo opuesto.


El estudio pone de manifiesto el poder de los grandes distribuidores frente a las pequeñas pescaderías. Las grandes cadenas adquieren y comercializan la mayoría de los productos pesqueros en España, y un 70 por ciento del total de los 5.600 millones de euros que los españoles gastan anualmente en pescado se vende en super e hipermercados.


Pese a esta posición estratégica para influir en la industria pesquera, las grandes compañías de distribución suelen ignorar el lugar y el método en que se capturan los productos pesqueros, sin atender tampoco a la salud de los stocks pesqueros mundiales o el impacto en la totalidad del medioambiente marino.


Greenpeace evalúa aspectos como la política de adquisición y de etiquetado de productos pesqueros, o la presencia de especies incluidas en su 'lista roja' de especies vulnerables. Concluye que ninguna de las seis grandes cadenas que operan en España - El Corte Inglés, Mercadona, Carrefour, Lidl, Alcampo (Auchan) y Eroski- alcanza siquiera la mitad de los parámetros exigidos.


Según estos datos, los supermercados de la cadena Lidl ocupan "el mejor puesto", aunque aún necesita mejorar muchos aspectos para que su política sea considerada "aceptable", explicó la responsable de la campaña, Paloma Colmenarejo. Lidl obtuvo 73 de los 252 puntos posibles (un 29 por ciento), seguida de Carrefour, con 52 puntos (un 21 por ciento) y a cierta distancia El Corte Inglés, con siete puntos (un tres por ciento), los mismos que Eroski. Las grandes superficies peor paradas en este ranking son Alcampo -Auchan, que obtuvo cinco puntos (un dos por ciento), y Mercadona, que obtuvo sólo tres puntos de los 252 posibles (un uno por ciento).


Política de compras


La asociación ecologista insta a los supermercados a "adoptar una política de compra sostenible" y les anima a vender sólo productos pesqueros de trazabilidad probada hasta el barco que lo pescó, "con evidencia de que la captura está dentro de las cuotas y recomendaciones establecidas y que no se incluye en la Lista Roja de especies". Anima también a promover la compra de productos pesqueros sostenibles y equitativos entre los consumidores, informándoles en la etiqueta del método de pesca o cultivo y el stock de captura.



Asimismo, les invita a trabajar con asociaciones ecologistas, Gobierno, industria pesquera y científicos para "mejorar la gestión, sostenibilidad y equidad de las pesquerías de las que se abastecen", y reclaman la declaración de una red global de reservas marinas que abarque el 40 por ciento de los océanos como "esencial" para protegerlos, "recuperar la salud de los stocks pesqueros y salvaguardar la vida marina de la destrucción y el colapso".


Según la organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), tres cuartas partes de los stocks pesqueros mundiales están totalmente explotados o sobreexplotados, mientras que el 88 por ciento de las poblaciones de la Unión Europea son víctimas de la sobrepesca, frente a la media mundial, del 25 por ciento. Además, las poblaciones de grandes predadores como el bacalao, el atún y el pez espada han caído un 90 por ciento en todo el planeta debido a la pesca descontrolada.