DEFENSA

España entrega a Senegal un avión y un helicóptero para vigilar sus costas

El Gobierno de España entregó al de Senegal un avión y un helicóptero con el objetivo de reforzar la vigilancia de las costas del país africano y controlar los flujos de inmigración ilegal que tratan de llegar a las islas Canarias.


El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ángel Lossada, de visita oficial en Dakar, fue el encargado de oficializar la cesión de las dos aeronaves donadas por el Ministerio de Defensa -un avión C-212 y un helicóptero UH-1H-, con la que España quiere reafirmar su colaboración con Senegal en materia migratoria.


La donación de estos medios aéreos, por un precio simbólico de cien euros, se enmarca en el trabajo en común que ambos países vienen desarrollando en los últimos cuatro años, dentro de una estrategia integral que abarca desde la repatriación de inmigrantes hasta la contratación en origen de trabajadores locales.


Senegal es, junto con Mauritania y Cabo Verde, uno de los principales puntos de partida de los cayucos que se dirigen a Canarias.


España ya donó dos patrulleras para vigilancia costera, que se unen a otras dos embarcaciones de la Guardia Civil y un helicóptero de la Policía Nacional que colaboran con las autoridades senegalesas y con la misión europea Frontex para frenar la inmigración ilegal.


El acto de entrega de las dos aeronaves tuvo lugar en la base militar de Dakar a través de la firma de un acuerdo con el ministro senegalés de las Fuerzas Armadas, Becaye Diop.


Lossada se reunió a continuación con el presidente del país, Abdoulaye Wade, quien le agradeció la ayuda española y reiteró el compromiso de Senegal en la lucha contra la mafias.


En el encuentro, repasaron los programas bilaterales en marcha, como las cinco escuelas taller que España está financiando para formar jóvenes senegaleses en ámbitos como la pesca o la agricultura.


Lossada, en declaraciones a EFE, apostó por "seguir profundizando" en un modelo que conjugue la promoción de empleo local y la contratación en origen de mano de obra.


España seguirá reclamando trabajadores senegaleses para ciertos sectores en la actual situación de crisis, aunque en función de la demanda del mercado laboral, según el secretario de Estado.


"Se trata de generar oportunidades aquí para la juventud y al mismo tiempo, mantener el esquema de colaboración y tratamiento de los flujos legales acordados con estos países", comentó.


"Está funcionando bien. Es un enfoque de cooperación compartido, no lo hemos elaborado unilateralmente", añadió Lossada, quien ya visitó Senegal en julio de este año en su primera gira africana.


Hizo extensivo este análisis para el caso de Mauritania, a pesar del cambio de régimen propiciado por el golpe militar del pasado 6 de agosto.


El 'número dos' de Exteriores destacó las "excelentes" relaciones con Senegal y la voluntad de España de elevar su rango para dotarlas de un "carácter estratégico".


España tiene presupuestados alrededor de 24 millones de euros en ayuda al desarrollo para Senegal en 2008.


En su encuentro con Wade en el Palacio Presidencial, hablaron de la crisis mundial e intercambiaron ideas sobre la cumbre con los países del África Occidental que el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, quiere convocar en el primer semestre de 2009.


El objetivo de esta cita es concertar acciones que favorezcan el desarrollo de la región, en áreas como las infraestructuras, la energía o la agricultura.


Antes de regresar a Madrid, el secretario de Estado, acompañado del embajador de España en Senegal, Jorge Toledo, va a tener un encuentro con los guardias civiles que están destacados en Dakar en tareas de vigilancia costera y de formación de agentes locales.


También va a visitar el centro de coordinación del proyecto europeo "Sea Horse", que tiene, entre otros fines, desarrollar un programa de control por satélite de la inmigración ilegal y el narcotráfico al estilo del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) que hay en funcionamiento en el Estrecho.


El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, tenía previsto viajar con Lossada a Dakar, pero no lo hizo finalmente por la detención en Francia de Mikel Garikoitz Aspiazu Rubina, "Txeroki", considerado el presunto jefe del aparato militar de ETA.