COCINA

Entre platos anda el premio

Laura Machín ganó un concurso de cocina en Benidorm y ahora aspira al título de mejor chef nacional.

Entre platos anda el premio
Entre platos anda el premio

Algo tendrá la cocina cuando dicen que es posible seducir a alguien a través del estómago. Laura Machín lo ha hecho: ha conquistado no a uno, sino a varios. A todos los selectos paladares que conformaban el jurado del 'Adecco Best Chef', un concurso de cocina para profesionales, que esta zaragozana ganó en su fase regional de Alicante. Fue hace solo unos días, en Benidorm. ¿Su receta? Muy rica, aunque no precisamente sencilla: un lomo de merluza a baja temperatura, con flor de sal y jalapeño ahumado, chutney de tomate, aguacate y emulsión de gamba roja. Casi nada. "Constaba de casi 40 ingredientes. El único requisito que tenía que cumplir era usar la merluza y preparar cuatro raciones en dos horas". Y 'voilá'?


El triunfo en esta contienda le ha abierto las puertas de otra superior: la nacional, que se celebrará en Madrid el 9 de septiembre y donde podría hacerse con el título de mejor chef nacional. Allí, la consigna será presentar un plato con pescados ahumados y otro, el principal, con pato. De momento, está pensando en unos raviolis de eneldo -"porque son totalmente transparentes y dejan ver el interior", cuenta-, pero tampoco puede dar más pistas. A la emoción del torneo, que podría darle el pase a la contienda internacional que se celebrará en Luxemburgo, se une un detalle concreto: de siete contendientes, tres serán mujeres. "En la cocina profesional, los hombres siempre han estado por encima. Pero, hoy, la mujer se está haciendo notar", informa Laura con orgullo.


El subidón que demuestra por el premio se desinfla cuándo se le pregunta por qué no concursa por Aragón. "Aquí -se lamenta-, no existe ninguna competición para potenciar la cultura gastronómica de la comunidad. ¡Con todos los productos que tiene!". Por eso, según dice, siempre ha tenido que marcharse fuera a presentar sus trabajos, en distintos certámenes para jóvenes profesionales. "Me gustaría representar a mi tierra, pero, aunque vaya de parte de Alicante, pondré ingredientes de aquí", anuncia.


Aunque solo tiene 24 años, siempre supo cuál sería su profesión. "De pequeña -recuerda-, me metía todos los días en la cocina con mi madre, así que, al acabar la ESO, me apunté a la Escuela de Hostelería Guayente de Benasque". Quizá por eso, la cocina tradicional sigue siendo su preferida. "Aunque transformándola un poco -matiza-. Adapto la cocina de la abuela a las costumbres de ahora, en platos como patata rellena de ropa vieja: es un cocido, pero con mi toque".


Aunque estuvo cinco años trabajando en Alicante, se siente mañica y ha vuelto para trabajar en Benasque, donde ejerce de jefa de cocina en el restaurante 'La Buhardilla'. Su intención es quedarse en Aragón, aunque le apetecería pasar unos años por Japón, ya que se declara seguidora de la cocina oriental. De España, se confiesa admiradora de Quique Dacosta y Berasategui, aunque no descarta ir a comer un día al restaurante de Ferrán Adriá. "Tengo que ir antes de que cierre, aunque no me convence mucho este tipo de cocina química. ¡Donde esté lo natural!".