EL HTC DESIRE, A PRUEBA

El teléfono móvil deseado

Como rosquillas. HTC saca un móvil nuevo cada semana. Hoy toca analizar la joya de la corona.

El teléfono móvil deseado
El teléfono móvil deseado

Es una copia descarada del Nexus One, pero eso no impide que el HTC Desire sea uno de los mejore móviles que hoy por hoy podemos encontrar en el mercado.

Su pantalla multitáctil de 3,7 pulgadas es grande, de gran contraste y responde al tacto a las mil maravillas. No dispone de teclado físico, por lo que hay que escribir con uno virtual y, aunque el que trae de serie no es muy bueno, se puede personalizar. La pega es que el Desire no es amigo de los ambientes luminosos y a pleno sol es imposible ver lo que aparece en la pantalla.

Su cámara de 5 Mpx detecta rostros, tiene enfoque automático y 'flash led' para los momentos de luminosidad más comprometida. Además, gracias a su GPS integrado, permite geoposicionar las fotografías en el mismo momento en el que son tomadas. El resultado final tanto de las instantáneas como de los vídeos es bastante bueno, aunque si lo que se busca es una cámara de fotos que además realice llamadas, existen móviles mucho mejores que el HTC Desire.

Su corazón late al ritmo de un excepcional Snapdragon a 1 Ghz, lo que le permite ejecutar el sistema operativo de Google con una fluidez fantástica. HTC ha incluido Android en muchos de sus teléfonos por tratarse de un 'software' libre y que cuenta con la tienda de aplicaciones más completa después de la del iPhone. Entre sus mejores programas se encuentran los que hacen uso de la realidad aumentada. Esta tecnología utiliza la cámara del móvil, la brújula y el GPS para mostrar sobre imágenes reales información en formato digital, que permite, por ejemplo, localizar tiendas o personas apuntando con el teléfono.

Sobre el sistema operativo de Google se encuentra el de HTC, que, además de otorgarle una apariencia más cuidada, ofrece una perfecta integración con redes sociales tan populares como Twitter o Facebook.

Su batería, como la de la mayoría de los 'smartphones', no dura más de un día de uso intensivo.