CON NOMBRE PROPIO

El coleccionista de papel

Gerardo Alcañiz Gil es uno de los coleccionistas de papel más importantes de Zaragoza. Acude todos los domingos a la plaza de San Francisco para vender, cambiar o comprar, sobre todo, fotos y postales.

Tiene 63 años, pero lleva desde los 13 coleccionando artículos de papel. Posee ex libris, fundas de hojas de afeitar, emblemas del Auxilio Social de la posguerra, cromos antiguos, títulos de propiedad de empresas... pero, sobre todo, acumula un rico catálogo de más de 3.000 fotos y postales de cualquier parte y época de España. Gerardo Alcañiz Gil es uno de los fijos de toda la vida del rastro de la Plaza de San Francisco, un mercadillo dedicado, fundamentalmente, a la filatelia y la numismática, pero en el que también se venden hoy libros, antigüedades, discos e, incluso, fósiles, entre otros objetos.


Empezó con los sellos cuando aún era un niño. Compraba, vendía o cambiaba junto a la plaza del Mercado Central, entre los porches del Pequeño Catalán y la calle de Predicadores, pero con la llegada de los ambulantes acabaron metiéndose en la calzada y el Ayuntamiento, para evitar peligros por el tráfico, los pasó a San Francisco.


Nada de internet. "La mayoría de los objetos los consigo en convenciones de coleccionistas o a través del intercambio con otros colegas de Zaragoza porque aquí nos conocemos todos y todos sabemos lo que tenemos", cuenta Alcañiz. No es que no quiera usar la web, sino que, afirma, "no tiene tiempo de meterse en la red".


Ni tiempo ni espacio. Alcañiz guarda todo su material en su casa del barrio del Arrabal. Ahora acaba de empezar una nueva colección sobre billetes del tranvía de los que pretende reunir el millón de números de una misma serie. "Es una tarea difícil que, probablemente, deberán acabar mis hijos y familiares para la que, según un estudio previo, necesito mil clasificadores y unos 270 libros de tamaño folio de unos seis centímetros de grosor cada uno de ellos", señala.


Nacido en Molinos (Teruel), a este prejubilado de Telefónica se le pasa el día ordenando, clasificando y organizando todo el material que va consiguiendo. De todo su repertorio, quizá lo más valorado sea la colección de las primeras postales de Zaragoza con certificado de circulación de Correos de finales del siglo XIX. Alcañiz posee una serie general de la capital aragonesa de 114 piezas editadas en Zaragoza por el fotógrafo Lucas Escolá. Según cuenta, "el centro de Zaragoza está muy documentado, pero de los barrios se encuentra poco material. Sí que hay, sin embargo, postales de Torrero -por el canal-, de Delicia -por la estación- y del Arrabal, por la industria que había a principios del siglo XX". El domingo que viene, como siempre, como todos, Alcañiz volverá a la plaza de San Francisco. Con sus fotos, sus postales... con mil historias e imágenes que contar.