CANTABRIA

Diez meses de prisión por los destrozos que provocó al intentar suicidarse

El imputado intentó suicidarse haciendo explotar una bombona de gas en un piso de Laredo, lo que provocó graves destrozos en el edificio donde se encontraba.

El Juzgado de lo Penal número 4 de Santander ha condenado a diez meses de prisión por un delito de estragos por imprudencia grave a un hombre que intentó suicidarse haciendo explotar una bombona de gas en un piso de Laredo, lo que provocó graves destrozos en el edificio donde se encontraba.


Los hechos ocurrieron el 25 de septiembre de 2004 en el edificio conocido como "Residencia Villa del Mar", cuando Francisco Javier G.C., heroinómano, llevó una bombona de butano a su habitación, dejó que se escapara el gas y encendió una llama para suicidarse.


La explosión, que ocurrió sobre las 14.50 horas, ocasionó importantes daños en el piso donde se encontraba (el octavo), así como en dos viviendas de la planta séptima y en elementos comunes del edificio, según se relata en la sentencia.


Pese a la gravedad de los daños, sólo resultó herido el propio acusado, que sufrió quemaduras de primer y segundo grado.


El Juzgado lo condena por un delito de estragos porque considera que cometió una imprudencia grave que puso en riesgo a las personas que vivían en el edificio y a las que podían deambular en ese momento por sus alrededores.


Sin embargo, le concede dos atenuantes: una muy cualificada de toxicomanía, por su adicción a la heroína, y otra de dilaciones indebidas en la instrucción del procedimiento judicial.