VECINOS DE BAENA

Detienen a cinco menores y un joven de 22 años por la violación de una niña en Córdoba

La Guardia Civil de Baena (Córdoba) detuvo este jueves a seis jóvenes, entre ellos cinco menores, por la supuesta agresión sexual a una niña a la que chantajearon para violarla de forma consecutiva en el patio común de unos bloques. El juez decretó el ingreso en prisión del adulto, un chico de 22 años, y el internamiento en un centro de menores para otros tres jóvenes, mientras que dos de ellos han quedado en libertad al ser uno de ellos discapacitado psíquico y tener el otro 13 años, una edad inimputable.


La noticia ha conmocionado a la localidad cordobesa, sobre todo al conocerse que la agresión sucedió a plena luz del día y que entre los presuntos autores hay cinco menores. Todo ocurrió sobre las 17.30 horas del pasado 2 de julio, cuando la niña, también de 13 años, se encontraba en la piscina de la Ciudad Deportiva Juan Carlos I de Baena. Uno de los menores, que anteriormente había tenido una relación sentimental con la chica, la abordó y la conminó a abandonar el recinto. Ella accedió porque el chico aún le gustaba. Pensaba que "iba a invitarla a salir" y retomar así la relación, según relató la madre de la niña, María Jesús.


Una vez fuera, la condujo a un patio común situado entre varios bloques de viviendas situado a unos 100 metros de la piscina, donde estaban sus amigos. La obligaron a mantener relaciones sexuales con todos ellos bajo la amenaza de mostrarles a sus padres un video en el que se veía a la chica con otro chico, que había sido grabado con un teléfono móvil sin su consentimiento. Ante el temor de que sus padres conocieran el vídeo, la joven accedió a las pretensiones del grupo "sin ofrecer resistencia", explicó María Jesús, quien entre lágrimas relataba que fue forzada "uno tras otro".


Compañero de clase

La joven aguantó el terrible secreto un par de días, hasta que el pasado 5 de julio decidió confesar a su madre que "tenía que contarle una cosa que ni siquiera podía saber su padre", contándole la violación y los múltiples abusos deshonestos a los que fue sometida. Nada más conocer lo ocurrido, los progenitores de la menor decidieron presentar una denuncia ante la Guardia Civil, que inició la investigación para detener a los presuntos autores, todos ellos vecinos de Baena.


La madre de la chica señaló que la niña sólo conocía a uno de sus agresores del colegio, dado que era compañero de clase, pero no al resto aunque acudían a clase al mismo instituto. A la hora de identificar a los presuntos agresores, la Guardia Civil tuvo en cuenta la descripción de la niña y el testimonio de una mujer de edad avanzada, que al pasar por las inmediaciones del patio percibió "algo raro" en la actitud del grupo, que vestía únicamente bañadores y chanclas y parecía que estaban forzando a la pequeña.


No fue sin embargo hasta la noche cuando lo comunicó a su marido, quien la animó a ponerlo en conocimiento de los agentes de la Policía Local.


Fuentes del caso explicaron que rápidamente fueron detenidos los seis presuntos agresores, entre ellos un joven de 22 años y otros cinco menores. Dos de ellos han quedado en libertad, ya que uno de ellos es inimputable dada su corta edad, 13 años, y otro padece una discapacidad psíquica reconocida, aunque tras comparecer ante el juez de menores de Córdoba se les ha impuesto una orden de alejamiento respecto a la niña. Asimismo, el juzgado ha decretado el internamiento en un centro de menores de los otros tres implicados, dos niños 14 y uno de 15 años, acusados de un supuesto delito de agresión sexual. El mismo cargo pesa sobre el único adulto, un joven de 22 años para el que un juzgado de guardia ha decretado prisión incondicional.


La familia de la chica no oculta su indignación por lo ocurrido, ya que como reconoce la madre, la niña está muy afectada psicológicamente, "tiene pesadillas todas las noches e incluso tengo que dormir con ella". No obstante, el sentimiento de protección de la menor coincide con la necesidad de denunciar lo sucedido y el ánimo de reclamar justicia y escarmiento para los autores de la agresión. En este sentido, el subdelegado del Gobierno en Córdoba, Jesús María Ruiz, ha condenado un hecho "terrible y lamentable" y ha pedido a la sociedad una reflexión sobre la necesidad de "educar en valores" a los jóvenes, tanto en el ámbito familiar como el docente, para que no se vuelvan a repetir casos similares.