GASTRONOMÍA

Cómo comer ecológico en Zaragoza

Tiendas, panaderías, mercados, supermercados, restaurantes... Cada vez es más fácil alimentarse de forma ecológica, sostenible y saludable en Zaragoza.

Comer sano ya no consiste solamente en comprar frutas y verduras en el supermercado y ponerse a dieta. Ahora para conseguir un cuerpo saludable es necesario alimentarse intentando introducir en nuestro organismo el menor número de sustancias químicas. Esto es posible gracias a la alimentación ecológica, una alternativa que va cobrando fuerza con el tiempo. Aunque es más cara y no está al alcance de todo el mundo.


En Zaragoza cada vez más negocios se denominan 'eco' y venden artículos que han sido producidos sin emplear sustancias artificiales o, en el caso de ser frescos, sin usar productos químicos en su crianza o cultivo.


Es el caso de Bio bio Zaragoza, un lugar donde se pueden encontrar desde las frutas y verduras con garantía de cultivo natural hasta bollería, carnes, cosméticos, productos de limpieza e incluso helados y chicles 'ecológicos' mexicanos.


José Manuel, ingeniero técnico agrícola, se asegura de que su mercancía cumpla los requisitos que su clientela exige. Como antiguo miembro del Comité de Agricultura Ecológica, sabe bien lo que hace: «Lo más importante es el producto fresco», sostiene. En su tienda no falta pescado, como dorada, trucha o lubina, al igual que diferentes tipos de carne.


Compra ecológica en un supermercado

Pero, ¿quién ha dicho que comprando en un supermercado no se come biológico? No en cualquiera, claro, pero en Naturalissimo, el primer supermercado ecológico de Zaragoza, no hay forma de encontrar nada con colorantes y conservantes artificiales. Situado en pleno centro de la ciudad, no solo se pueden adquirir alimentos, también artículos de ocio o para el hogar.


Desde 2009, Zaragoza cuenta con su propio mercado ecológico, en el que, dos sábados al mes, cualquiera puede ir, mirar y adquirir pan, bollos, fruta, verdura, zumos y hasta licores de elaboración artesanal, a la vez que se conoce personalmente al productor. La cita es en la plaza Sinués Urbiola.


En el polo opuesto encontramos establecimientos más específicos. La panadería Ecomonegros, una empresa familiar ubicada en Leciñena, distribuye una gama de productos elaborados a partir del trigo que ellos mismos cultivan, almacenan, limpian y muelen de forma completamente artesanal.


En su tienda, ubicada en Zaragoza, ofrecen desde pan hecho a mano hasta magdalenas, pastas o bizcochos. Así como harina biológica y artesanal.


Ahora, y gracias a las nuevas tecnologías, comer ecológico es más fácil. Tiendas como Mundo imaginado ponen a disposición de todo internauta su catálogo para que, a golpe de click, cualquiera pueda cambiar sus hábitos por otros más saludables y sostenibles. Lácteos, aceites, comida para bebés, productos de limpieza… Todo ello aderezado con una selección de productos de comercio justo de Crianza natural, una empresa que se dedica a comercializar productos naturales relacionados con el embarazo, cuidado y desarrollo de los niños.


Comer fuera y seguir siendo ecológico

Si se trata de mantener la filosofía y darse un capricho cenando o comiendo en un restaurante. Los reyes son los vegetarianos, como el bar Birosta, un acogedor lugar con biblioteca y sala de exposiciones cuyos productos proceden de cultivo ecológico y de comercio justo. En su carta, variada como la de cualquier otro bar-restaurante, distinguen entre vegetariano y vegano, ofreciendo bocadillos, tapas, pizzas, postres, tés, cafés y platos tan sugerentes como su seitán casero o la pasta thai.


Desde 1989, La retama ofrece, en la plaza de San Miguel, sus platos vegetales y ecológicos. Aparte de un precio muy económico en sus menús diarios y la opción para llevar, el restaurante La Retama imparte periódicamente cursos de cocina, en los que aprender a elaborar platos vegetarianos, yogures, patés, postres… y, sobre todo, aprovechar la amplia experiencia del negocio.