FRANCIA

Carla Bruni protege a Giulia de las cámaras

La esposa y la hija de Sarkozy reciben el alta. Zapatero felicita en persona al presidente francés. Merkel le regala un peluche.

Carla Bruni con su hija, a la salida de la clínica.
Carla Bruni protege a Giulia de las cámaras
ALEXANDER KLEIN/AFP

Carla Bruni, la esposa del presidente francés, Nicolas Sarkozy, salió ayer de la clínica de París en la que dio a luz el pasado miércoles, protegiendo de las cámaras a su hija Giulia.


Carla Bruni-Sarkozy abandonó la clínica de la Muette, en el distrito XVI de París, con su bebé en brazos cubierto por entero con una toca de color oscuro y se introdujo en un coche que le esperaba, según las imágenes de los fotógrafos y los cámaras que estaban apostados en las proximidades.


La primera dama de Francia insistía desde hacía semanas en que no quería que la hija que ha tenido con Sarkozy fuera fotografiada y aseguraba que no iba a exponerla públicamente. También se ha sabido que incluso ha preparado una posible respuesta legal por si la prensa no respeta el derecho al anonimato y a la intimidad de la pequeña.


El presidente francés, que ayer se encontraba en Bruselas participando en el Consejo Europeo, acudió el sábado a la clínica donde estaba internada su mujer en tres ocasiones. En la cita de la capital belga, la canciller alemana, Angela Merkel, regaló al presidente francés, Nicolas Sarkozy, un oso de peluche para su hija recién nacida.

El miércoles por la tarde, cuando Carla Bruni dio a la luz, el presidente francés no se encontraba en París sino en Francfort, reuniéndose, precisamente, con Merkel para negociar sobre la deuda griega, un asunto que divide a París y Berlín.

De hecho, Sarkozy ha pasado más tiempo con la canciller alemana que con su mujer y su hija en los últimos días, ya que los líderes europeos llevan imbuidos desde el viernes en un maratón de reuniones en Bruselas para restablecer la confianza en el euro. Allí se ha visto también con el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que ayer le felicitó personalmente por el nacimiento de su hija.


Al inicio de la cumbre y antes de que empezarán las sesiones de la misma, Zapatero y Sarkozy mantuvieron una conversación en la que se pudo escuchar al jefe del Ejecutivo español cómo felicitaba al presidente francés por el nacimiento de su Giulia.


Zapatero se interesó también por el estado de la esposa del jefe del Estado galo, a lo que Sarkozy respondió con un gesto indicando que se encontraba perfectamente.


Giulia es el segundo hijo de Carla Bruni, después de Aurélien, nacido en 2001 fruto de una relación con el filósofo Raphael Enthoven. Sarkozy tenía ya otros tres hijos de sus dos primeras esposas: Pierre (nacido en 1985), Jean (en 1986) y Louis (en 1997).