'Cocina con Joseba Arguiñano', cien recetas de un cocinero "disfrutón"
El libro ha sido presentado este miércoles en el restaurante Karlos Arguiñano de Zarautz en un acto en el que ha estado su padre, al que, ha reconocido el joven chef, repostero y panadero, no le supera "porque es un crack en lo que hace".
Joseba Arguiñano ha seleccionado en su primer libro un centenar de recetas que recomienda tanto para una comida familiar, como para un picoteo, una merienda "resultona" o incluso para sorprender con preparaciones de los diferentes lugares del mundo a los que la afición al surf ha llevado al "más disfrutón" de los hijos del conocido cocinero.
"Cocina con Joseba Arguiñano" (Planeta) ha sido presentado este miércoles en el restaurante Karlos Arguiñano de Zarautz (Guipúzcoa) en un acto en el que ha estado su padre al que, ha reconocido el joven chef, repostero y panadero, no le supera "porque es un crack en lo que hace".
"Yo le he dado a otras ramas en las que él no se ha metido, como el pan y el dulce, siguiendo el camino de mi tía Eva", ha señalado Joseba, que ha indicado que en esa área cree que "le gana".
A pesar de que le llamen el "rey del croissant", Joseba Arguiñano ha reconocido que su corazón está dividido entre lo dulce y lo salado y entre sus platos estrella figuran el talo con txistorra y los pimientos rellenos, además de las sopas elaboradas con fideo ramen.
El cocinero anima a los lectores a hacer las recetas que proponen porque "van a salir" y asegura que están pensadas para todos los paladares.
"En la cocina todo está a tu alcance y la clave es atreverse. La receta más sencilla puede ser la más exquisita. Como las maravillas que te salen solo con pan, mantequilla, agua y sal", afirma.
En el recetario de "Cocina con Joseba Arguiñano" figuran desde tostas de guacamole, a tortilla de calabacín con queso, pasando por solomillo de cerdo con piña, risotto de chipirones, rosquillas de la abuela o polos cremosos con chocolate.
Criado entre fogones, Joseba empezó en la cocina "casi sin querer" porque lo que le apasionaba de adolescente eran las motos, aunque en su familia le dejaron claro que si quería una tendría que ganársela, por lo que acabó "echando horas" en el restaurante de Zarautz siendo un crío de 13 años, confiesa en el prólogo del libro.
Estudió cocina profesional en la escuela de Aiala-Karlos Arguiñano y se formó en pastelerías como Escribà en Barcelona y la francesa Thierry Bamas, aprendió panadería avanzada en Suiza e hizo prácticas en Akelarre, de Pedro Subijana.
Eva Arguiñano despertó la pasión por la repostería en Joseba, que con 23 años tomó el testigo de su tía cuando esta dejó el restaurante lo que le llevó en 2013 a fundar en el casco antiguo de Zarautz la pastelería y panadería JA.
Heredero también de la capacidad comunicativa de su padre, Joseba colabora con él en Cocina Abierta de Karlos Arguiñano en Antena 3 y recorre Euskadi con el programa Historias a bocados de ETB.
