Tercer Milenio
En colaboración con ITA
Ciencia y filatelia
Científicos aragoneses con sello propio: Miguel Catalán
Aunque la ciencia no es una de las ramas más presentes en las emisiones de los sellos de correos (al menos en España), podemos encontrar algunos dedicados a científicos aragoneses. Por ejemplo, a Miguel Catalán.
Miguel Ángel Catalán Sañudo nació en Zaragoza en 1894. Fue un estudiante brillante, obteniendo Premio Extraordinario de Bachillerato y Premio Extraordinario en la licenciatura de Químicas, que cursó en la Universidad de Zaragoza. Se doctoró en la Universidad de Madrid en 1917 con una tesis sobre la espectroquímica del magnesio. La espectroscopia o espectrografía es el estudio de la interacción entre la radiación electromagnética y la materia, con absorción o emisión de energía radiante.
En 1920, becado por la Junta de Ampliación de Estudios, se trasladó al Imperial College de Londres, abandonando la espectroscopia como técnica de análisis químico y entrando en la física atómica. Su formación se completa con la asistencia a conferencias de Albert Michelson y Ernest Rutherford. Su intensa labor investigadora le permitió en 1921-1922 el descubrimiento de los multipletes en el espectro del átomo de manganeso, que tanta trascendencia habría de tener en la física mundial. Examinando el espectro del manganeso, determinó que el espectro óptico de átomos complejos contenía grupos de líneas antes desconocidas a los que llamó 'multipletes', entre las que existían regularidades características. Catalán demostró que el estudio de los multipletes llevaba a una mejor comprensión de los estados energéticos de los electrones. Además, mostró que lo observado en el manganeso no era específico de este y aparecía en otros elementos, lo que contribuyó a sentar las bases para la introducción de las altas multiplicidades en la teoría de la espectroscopia atómica. El trabajo de Catalán sobre el espectro del manganeso fue publicado en julio de 1922 en las 'Philosophical Transactions', primera revista del mundo dedicada exclusivamente a la ciencia y en la que publicaron artículos científicos de relevancia mundial como Newton, Faraday y Darwin.
Miguel Catalán continuó con sus trabajos en el ámbito de la espectroscopia y la estructura atómico-molecular derivando hacia problemas astrofísicos. Entre sus estudios destaca el del espectro del hierro, que fue imprescindible para entender el funcionamiento de las atmósferas estelares, siendo por tanto de importancia capital en la astrofísica moderna.
En 1950 fue nombrado jefe de la sección de Espectros Atómicos del Instituto de Óptica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y obtuvo reconocimiento internacional. En 1952 fue nombrado miembro de la Joint Commission for Spectroscopy del International Council of Scientific Unions y en 1955, de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid.
Dirigió el Departamento de Espectroscopia del CSIC hasta el fin de sus días en 1957 y publicó más de 70 trabajos sobre espectroscopia.
Por su contribución al desarrollo de la astrofísica, un cráter de la Luna lleva el nombre de Miguel A. Catalán, legado de la huella de este brillante científico aragonés. Además, en Zaragoza y Coslada hay dos Institutos de educación secundaria que llevan su nombre.
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