#quédateencasa

5 ideas (más allá de hacer galletas) para pasar tiempo en la cocina con los niños

Implicar a los pequeños de la casa en las tareas cotidianas no solo les mantiene entretenidos, sino que puede ser un método de aprendizaje.

Además de preparar recetas, en la cocina se pueden realizar otras tareas con los pequeños de la casa
Además de preparar recetas, en la cocina se pueden realizar otras tareas con los pequeños de la casa
Freepik

Tras más de quince días en casa, es difícil encontrar tareas que, más allá de los deberes, mantengan a los niños ocupados. Aunque los juegos pueden ser tantos como alcance la imaginación (desde disfrazarse en casa a reconstruir el árbol familiar con fotos antiguas), también es una buena ocasión para que los pequeños aprendan a desarrollar otras tareas del hogar o se impliquen en la realización de las mismas.

La cocina es uno de los lugares clave para empezar a participar en dichas tareas y, de paso, llenar bastante tiempo libre. A partir de los 2 o 3 años ya pueden participar, por ejemplo, en la elaboración de alguna receta -preparar algo dulce es muy tentador estos días-, pero si tienen algo más de edad hay otras ideas con las que los pequeños se pueden involucrar.

1. Ordenar la compra. Puede que mantener los juguetes ordenados no sea lo que más rápido entretiene a los niños, pero proponerles ordenar la compra o el interior de los armarios puede convertirse en un juego si se les explica dónde va cada cosa y por qué.

2. Preparar el menú semanal. Abrir la nevera, apuntar todo lo que hay y a dar rienda suelta a la imaginación con lo que se va a comer en los próximos días. No es mal momento para repasar además un poco de ciencias naturales y recordar cuáles son los alimentos clave de una dieta equilibrada y con qué frecuencia hay que tomar cada uno a lo largo de la semana.

3. Leer una receta. Puestos a cocinar, además de ayudar en la preparación de una receta, los niños pueden ser los encargados de leer los pasos a seguir durante el cocinado. Así, además de entretenidos y ser los jefes de cocina, practican la lectura. También se puede hacer lo mismo con el cálculo de cantidades.

4. Explorar los sentidos. Además de cocinar, a través de los alimentos y los procesos de elaboración se puede desarrollar los cinco sentidos: gusto, vista, tacto, olfato y oído. El olor de las especias, cómo sube un bizcocho en el horno por la levadura, preparar una masa de pizza, probar alimentos nuevos…

5. No olvidarse de la limpieza. La limpieza en profundidad de la cocina es una de esas tareas del hogar que siempre se pospone. Hacerlo en familia puede ser la excusa perfecta y más si se propone como un juego o, por ejemplo, un concurso de quién es capaz de limpiar un cajón o unas baldosas. Eso sí, hay que tener cuidado con los productos de limpieza que se usan.

¿Quieres recibir todas nuestras propuestas de planes para hacer con niños? Apúntate y te enviaremos nuestra newsletter.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión