Tercer Milenio
En colaboración con ITA
Transferencia
Un muelle para respirar
Este proyecto consiguió el segundo de los premios Triple Hélice de la Universidad de Zaragoza.
El proyecto ‘Un muelle para respirar’ nació hace cuatro años, con el objetivo de encontrar la solución para una enfermedad, la traqueomalacia, en la que la tráquea pierde consistencia y es incapaz de permanecer abierta durante la respiración. Como resultado, se ha desarrollado desde cero una nueva prótesis que cambia el concepto actual de ‘stent’ traqueal. Esta novedosa prótesis traqueal, patentada con el nombre de ‘CasMin Twine’, ha conseguido mantener las ventajas de los ‘stents’ actuales y evitar sus complicaciones.
El origen de esta aventura es una idea que surgió como trabajo fin de grado de Veterinaria de Sandra López Mínguez, tutorizado por Carolina Serrano, realizando pruebas de diseño. Posteriormente, decidieron continuar el proyecto con una tesis doctoral, por lo que se realizaron estudios in vivo, y actualmente se está trabajando en el ensayo clínico.
Para demostrar su eficacia y los beneficios que presenta, se ha comenzado tratando a pacientes caninos con grave degeneración traqueal, derivados por centros veterinarios de toda España. Tras implantar la nueva prótesis, el seguimiento realizado engloba pruebas por imagen y evolución clínica y del estado corporal del paciente durante 12 meses. Los resultados obtenidos hasta el momento son prometedores y, gracias a las similitudes entre la patología en animales y niños, se espera que, en el futuro ambos, unos y otros se puedan beneficiar de esta prótesis.
El proyecto ‘Un muelle para respirar’, segundo clasificado en los últimos premios Triple Hélice, ha sido posible gracias al grupo de Investigación en Técnicas Mínimamente Invasivas (GITMI), de la Universidad de Zaragoza. Formado por veterinarios, médicos e ingenieros especialistas en radiología intervencionista, el grupo Gitmi lleva más de 15 años activo, capitaneado por el catedrático Miguel Ángel de Gregorio Ariza. La vía respiratoria es una de las principales líneas de investigación.
El próximo paso de ‘Un muelle para respirar’, "una vez finalizados los estudios clínicos, sería lanzar al mercado la prótesis, inicialmente para veterinaria y, quién sabe, ¿será también la solución para los niños con esta enfermedad?", se pregunta Sandra López, contenta de ver que "una idea sea realidad".
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