Operan a una mujer sin anestesia por error: "Agonizaba y no escuchaban mis gritos"
El Hospital Yeovil, en el Reino Unido, reconoce que suministró a la paciente un anestésico espinal en lugar de general, provocándole un terrible dolor y traumas posteriores.
El hospital británico Yeovil, en Somerset, Reino Unido, ha reconocido que se equivocó al anestesiar a una paciente, que estuvo consciente durante toda la operación. “Grité cuando el cirujano me cortó el ombligo, pero nadie me escuchó", ha contado la afectada, de 30 años.
Todo ocurrió en 2018, cuando la paciente estaba en quirófano para someterse a una cirugía ginecológica. Los médicos, por error, le suministraron anestesia espinal en lugar de general. Esto hizo que se mantuviese consciente durante toda la operación. Ahí empezó su infierno. Según ha informado el bufete de abogados que lleva el caso, el cirujano procedió a abrir su vientre y ella notó cómo le cortaban literalmente el ombligo. Su reacción fue gritar desesperadamente "de agonía", aunque según indicó la propia víctima nadie le hizo caso porque “tenía una máscara de oxígeno y una cortina de separación". “Estaba agonizando, pero no escuchaban mis gritos”, relató la mujer, que prefiere mantenerse en el anonimato. "La gota que colmó el vaso fue cuando mi abdomen se llenó de gas”, añadió.
Aumento de la presión arterial
La paciente supo desde el primer momento que la anestesia no estaba funcionando bien, ya que tenía hijos y sabía cómo actuaba la epidural. Durante el proceso, la víctima incluso tuvo un aumento de la presión arterial y pese a ello los médicos continuaron con la intervención.
La mujer tiene pesadillas desde la intervención y ha perdido la confianza en los médicos. "Tengo imágenes sobre una mesa con gente mirándome y sin escuchar mis gritos", contó la mujer a la BBC. Los psicólogos le han diagnosticado estrés postraumático.
El hospital admitió, según el despacho que lleva la defensa de la paciente, que la mujer debería haber recibido un anestésico general en lugar de un anestésico espinal. De hecho, su cirujano le reconoció que nunca antes había llevado a cabo esta operación con una paciente consciente. Atribuyen el fallo a un "error de comunicación".
