EDUCACIÓN EMOCIONAL PARA FAMILIAS

El paso de educación infantil a primaria, un nuevo y apasionante reto

Llega un nuevo reto para nuestros hijos: el paso de educación infantil a primaria. Los cambios siempre dan miedo, pero enseguida cogemos el ritmo y nos acostumbramos a la nueva situación. Sin embargo, es un momento que preocupa a muchos padres, del que merece la pena hablar. 

Los cambios son para crecer y fortalecernos como personas-
Los cambios son para crecer y fortalecernos como personas.
ARANZAZU NAVARRO

El paso de educación infantil a primaria no solo preocupa a los pequeños, también tiene en vilo a muchos padres. Sin embargo, y aunque los cambios siempre dan miedo, hay que afrontarlo con optimismo, enseguida cogeremos el ritmo y nos acostumbraremos a la nueva situación. De cualquier modo, no estaría de más tener en cuenta alguna de estas pautas y recomendaciones. 

¿Sabes leer? Que esta pregunta no os inquiete demasiado, porque, durante el primer trimestre, los profesores se centran en la lectura y escritura, respetando los ritmos de cada pequeño.

Deberes para casa. Muchas familias os preguntáis si vuestros hijos llevarán deberes a casa. Esto depende de cada profesor, aun así suelen ser actividades sencillas y entretenidas que os animamos a compartir con ellos sin presiones. También es una oportunidad para fomentar la autonomía, dejándoles que sean ellos mismos los que hagan sus tareas escolares.

¿Aprobaré el examen? Todos recordamos los nervios previos a un examen; mejor, así podréis empatizar con vuestros hijos y, con vuestro apoyo y comprensión, superarán este nuevo reto.

Varios profesores. Otro de los cambios importantes es pasar de tener un profesor de referencia a tener varios, que se encargan de distintas asignaturas. Vuestros hijos están acostumbrados a sus profesores de infantil, pero en esta etapa llegan nuevas caras. Al principio, estarán nerviosos, inquietos, pero rápidamente, los diferentes profesores se convertirán también en sus referentes.

Nuevas asignaturas. En infantil, el aprendizaje es globalizado y se evalúa por áreas. Ahora, llegan las asignaturas, en las que cada materia se trabaja de manera diferente y será evaluada. Es una forma distinta de trabajar a la que los niños se habitúan pronto. Ya veréis que contentos saldrán con sus notas.

Caras nuevas. Van a tener la suerte de conocer a nuevos compañeros. Aunque muchos ya se conocen del recreo o del comedor, es otra oportunidad para ampliar su círculo de amistades.

Más responsabilidades. Es el momento de hacerse más autónomos. Ahora se encargarán de su mochila, de los deberes, de no olvidarse los libros en clase, de estudiar en casa, de ser organizados, de prepararse sus materiales, de apuntarse las cosas en la agenda… Tenemos que dejarles hacerse mayores.

Espacios para descubrir. Los primeros días podrán convertirse en exploradores, descubriendo sus nuevas clases, mesas, recreo... Los espacios también son fundamentales en el aprendizaje, porque motivan y animan a aprender. Al principio, todo les parecerá muy grande. Pero, conforme vayan familiarizándose con los nuevos espacios, descubrirán las ventajas y estarán encantados.

Materiales diferentes. Por fin tendrán su mochila con ruedas. La ilusión de estrenar su estuche, lápices, rotuladores, cuadernos… hará que el cambio sea más entretenido y motivante. ¿A quién no le gusta estrenar cosas?

¡Fuera agobios! Los cambios son para crecer y fortalecernos como personas, hacernos más fuertes, resilientes, empáticos y maduros. Vuestros hijos necesitan que estéis a su lado con una mirada respetuosa y afectuosa y, sobre todo, desde la calma. Hay que intentar no transmitir nuestros miedos, inquietudes y nervios a los hijos, ya que para ellos es una nueva aventura y deben vivirla desde la alegría y las ganas de conocer cosas nuevas.

Camino Felices / Ana Rojo. Asociación Aragonesa de Psicopedagogía

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión