¿Eres capaz de detectar estos micromachismos?

Los trabajadores sociales Belén Arbués y Pedro Artal apuestan por crecer con una coeducación "que luche por la igualdad en todos los aspectos de la vida".

¿Eres capaz de detectar estos micromachismos?
¿Eres capaz de detectar estos micromachismos?

¿Los hombres y las mujeres pueden ser amigos? ¿Qué es lo primero que piensas cuando ves a un chico y a una chica juntos por la calle? ¿Sujetar la puerta es machismo o es educación? ¿Seguro que si los niños te tiran a suelo es porque les gustas? ¿Es el ’90 – 60 – 90’ una medida “perfecta”? ¿Es machista que las chicas entren gratis a los bares y los chicos no? ¿A quién le dan la cuenta en un restaurante? ¿Qué pasa si una chica entra al baño de chicos porque el suyo está abarrotado? ¿Y si sucede al revés? ¿Deben ser las pruebas físicas de un policía distintas a las de una policía? ¿Es lo mismo género y sexo? ¿Puede confundirse el romanticismo con el control?

Todas estas preguntas pueden englobarse en una: ¿dónde empieza la violencia de género? Este último y otros términos como igualdad, machismo o feminismo están latentes en el vocabulario social del siglo XXI pero, ¿entendemos lo que significan y, sobre todo, lo que implican?

“Los niños han oído el término ‘machismo’ en muchas ocasiones, pero no siempre conocen el significado como tal de la palabra, por lo que tienden a utilizarlo en contextos en los que no encaja”, explica Pedro Artal quien, junto a su compañera, Belén Arbués, ambos trabajadores sociales, ha impartido 143 talleres de coeducación y prevención de violencia de género a alumnos de 6º de Primaria y 4º de la ESO de distintos pueblos de la provincia de Zaragoza durante los dos últimos meses, un¡ proyecto de Océano Atlántico subvencionado por la Diputación de Zaragoza.

“Cuando empezamos nos sorprendió mucho que ya son conscientes de que los colores o los juguetes no tienen género. Pero después hay que demostrarles que realmente no lo tienen y es primordial que en el colegio se trabaje esto, además de en casa”, prosigue Arbués.

¿Cómo? Para empezar, con una reflexión:

¿Crees que existen micromachismos en nuestro día a día?

 

Estos son algunos de los ejemplos sobre los que invitan a reflexionar a sus jóvenes oyentes los dos trabajadores sociales de Océano Atlántico. “El objetivo es que piensen y sean el motor principal de toda la actividad”, recalca Artal.

“Hablamos de maltrato, de tipos de violencia, de que los chicos lloran y las chicas no son frágiles, del abuso a través de las redes sociales, de la desigualdad aplicada a través de los colores, los juguetes, los deportes, los trabajos, en Disney, en las tareas de la casa…” repasa Arbués. Y prosigue: “Para ello, les proponemos varias actividades, por ejemplo, les ofrecemos una lista de adjetivos y les pedimos que los repartan entre los chicos y las chicas. Así, ellas son sensibles, dulces e inseguras y ellos, agresivos, fuertes, valientes, creativos y poderosos”.

Para los profesionales, “las frases que oímos desde que son pequeños pueden fomentar la desigualdad, el machismo y la violencia de género” y “condicionar nuestros gustos, vocaciones y personalidad”, por lo que es importante crecer con una coeducación “que luche por la igualdad en todos los aspectos de la vida”.

La formación que imparten en los centros zaragozanos, que dura aproximadamente dos horas, pretende ser el impulso de esta coeducación para que después sean los propios institutos los que tomen el relevo a través de la guía de profesorado, los dípticos, vídeos y el resto de material que ofrecen para ello.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión