¿Eres capaz de resolver este acertijo?

Un padre y su hijo viajan en coche y tienen un accidente grave. El padre muere y al hijo se lo llevan al hospital porque necesita una compleja operación de emergencia, para la que llaman a una eminencia médica. Pero cuando entra en el quirófano dice: "No puedo operarlo, es mi hijo". ¿Cómo se explica esto?

A pesar de que algunos se habrán quedado en blanco, la respuesta es sencilla. La eminencia médica de la que se habla en este supuesto es la madre del niño. Si no has conseguido dar con la resolución de este ejercicio, no te preocupes, no se trata de una cuestión de inteligencia, te han vencido tus prejuicios. 

Tras las masivas movilizaciones del pasado 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, que recorrieron las calles de los pueblos y ciudades españolas clamando por la igualdad, este enigma ha ganado importancia y se ha convertido en un recordatorio, para hombres y mujeres, de la profundidad e inconsciencia del machismo.

Un estudio de la Universidad de Boston, realizado en 2014 por las investigadoras Mikaela Wapman y Deborah Belle, reveló que, de los 197 universitarios a los que se les formuló este acertijo, solo el 14% fue capaz de dar con la respuesta. Entre los 103 menores (de 7 a 17 años) a los que se les realizó la prueba, el porcentaje de aciertos fue similar. ¿Dónde está el problema?

Sesgo cognitivo

Este mecanismo psicológico, que produce una desviación en el procesamiento mental de la información, provoca juicios inexactos, interpretaciones ilógicas y, en términos generales, una pérdida del sentido común y de la racionalidad. En el caso de este razonamiento, el sesgo cognitivo se vale de los ejemplos prototípicos (eminencia médica: hombre) residentes en la mente de los receptores para establecer una conclusión que no deja que otras opciones (en este caso, la más lógica) aparezcan como respuestas posibles al problema.