Un espacio limpio, luminoso y sostenible. Así fue como Steve Jobs ideó Apple Park cuya última idea parece estar llevando de cabeza a algunos de sus empleados. Pocos meses después de su apertura, ya han sido varios empleados y visitantes los que se han golpeado con sus cabezas en alguna de las paredes y puertas de cristal que conforman Apple Park. Debido a ello algunos de los trabajadores colocaron en su momento post-its para avisar de los peligros de esta transparente estructura. Sin embargo, según el medio online Bloomberg, tuvieron que retirarlos ya que afectaban al diseño del edificio.

Ahora el diario digital San Francisco Chronicle ha publicado las grabaciones de algunas de las llamadas a emergencias. Más concretamente se trata de tres llamadas realizadas los primeros días tras la inauguración: dos el 2 de enero y otra el 4.

"Somos Seguridad de Apple, queremos informar de una emergencia médica". Así comienza la primera llamada en la que avisa que una hombre entre los 20 y 30 años ha chocado  contra una pared de cristal, golpeándose la cabeza. "Tiene un pequeño corte en la cabeza y está sangrando, algo desorientado", describe otro de los trabajadores al operador. "¿Hay algún sangrado importante?", pregunta el operador -que momentos después pregunta si está consciente y si respira". "Sí, en la cabeza".

Unas horas después tuvo lugar la segunda llamada en la que se informaba de que "un empleado se ha golpeado con un panel de cristal y tiene un corte por encima de la ceja". Más adelante se oía a una segunda persona, dirigiéndose al empleado de Apple que llama a emergencias "es un corte en la ceja. Según nuestro... llamémosle 'personal certificado de primeros auxilios' va a necesitar puntos".

Dos días después tuvo lugar la tercera llamada y en la que fue el propio afectado quien la contó a los servicios de emergencias. "Um... estaba caminando y me he dado contra una puerta de cristal en la primera planta del Apple Park cuando intentaba salir, ha sido muy tonto..." explica. "No le oigo bien"  dice la telefonista "¿dice que ha caminado a través de una puerta de cristal?". "No, no he caminado a través de una puerta de cristal, he caminado contra una puerta de cristal".  Esta vez no hubo heridas y el empleado no estaba sangrando.