El exsoldado británico Dean Stott, que pretende batir el récord del recorrido en bicicleta de la ruta Panamericana, afirmó este martes que la labor en pro de la salud mental emprendida por el príncipe Enrique, nieto de la reina Isabel II de Inglaterra, ha sido su "inspiración" para asumir este reto.

Stott, un antiguo miembro de las Fuerzas Especiales británicas que coincidió con el príncipe en el Ejército en 2007, aseguró que decidió emprender la travesía después de conocer el trabajo de la fundación Heads Together, auspiciada por los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, y el propio Enrique.

La Fundación persigue aumentar la concienciación sobre los problemas de salud mental y romper con el estigma que arrastran, y a ella serán destinados los fondos que obtenga Stott con su iniciativa.

"Soy un novato en esto, pero después de una conversación con el príncipe Enrique, me inspiré para involucrarme en esta increíble campaña y su pasión fue suficiente para motivarme", señaló tras reunirse en el londinense palacio de Kensington con el príncipe Enrique, hijo del príncipe Carlos, heredero de la Corona.

Explicó que tras una lesión en la rodilla, se vio obligado a abandonar el ejército y, como consecuencia, pasó por un periodo psicológico complicado, que le llevó a tomar conciencia sobre la gravedad de los problemas mentales.

"La lesión me dejó en un lugar bastante oscuro, perdí mi identidad y mi salud mental se resintió. Físicamente, pasé de lo mejor de mí mismo a ser incapaz de realizar las tareas más básicas", detalló.

Entonces encontró refugio en el ciclismo y, por ello, su reto consiste en recorrer en 110 días los cerca de 22.500 kilómetros de la ruta Panamericana desde Ushuaia (en el sur de Argentina) hasta terminar en Prudhoe Bay (norte de Alaska), donde espera haber batido el actual récord Guinness que está en 117 días.

Stott, que actualmente reside en Aberdeen (Escocia), tiene como objetivo recaudar 1,1 millones de euros para obras benéficas como parte de la campaña que lidera Heads Together.

El príncipe Enrique, por su parte, agradeció a Stott su compromiso con los objetivos de la Fundación y resaltó la importancia de su iniciativa.

"Sabe lo importante que es para mí que nos aseguremos de que cualquier persona con problemas mentales pueda hablar abierta y honestamente, y obtener el apoyo que necesita. Su apoyo nos ayudará a lograr eso. Gracias y buena suerte", declaró.