Muchos son los consumidores que deciden esperar a la temporada de descuentos para hacer sus compras, que van desde las necesidades hasta los caprichos. Para quienes se reservan a la llegada de las rebajas para completar su armario, aquí están algunas de las prendas más deseadas para ser lucidas durante esta temporada estival.

No hay escaparate que, además de los carteles anunciando la llegada de las rebajas, este verano no muestre alguna prenda con estampado floral. Y es que las flores se llevan de todas las formas, colores y tamaños. En su versión más equilibrada y comedida -en vestidos de corte recto, con vuelo y de colores neutros- o en su faceta menos convencional -en blusas con volantes, asimétricas y sobre colores llamativos-.

Otra de las tendencias de esta temporada, a la que es posible sumarse ahora a precios más asequibles, es la de mantener los hombros fuera. Las blusas se desprenden de sus cuellos y dejan las clavículas al descubierto. Se llevan con mangas y tirantes, lisas o con rayas blancas surcando colores pastel, entre los que destacan el azul y el rosa.

Los kimonos, las popularizadas prendas tradicionales japonesas, cortos o largos, sirven para cubrir estilismos basados en la simplicidad, o para darle un giro a las prendas de noche. Para quienes tengan pensado disfrutar de la playa o de la piscina durante las vacaciones, esperar a julio para adquirir un nuevo traje de baño es una buena opción para ahorrar. Se llevan los bikinis y bañadores, en terciopelo, con volantes, de inspiración 'boho' o con estampado tropical.

Otra de las tendencias más seguidas, y que mejor sienta sobre una piel bronceada, es la de hacerse con una prenda en color amarillo, uno de los tonos estrella de este verano. Se lleva en vestidos con volantes, lisos o estampados. El denim se mantiene en uno de los primeros puestos de la lista aunque esta temporada añade, a los rotos y descosidos, bordados con los que alegrar los estilismos más casuales e informales.

Las camisetas básicas se han rebelado y se han reconvertido incluyendo flecos, cuerdas y estampados de grupos de música 'rock' y 'heavy', aunque estas no son aptas para todos los gustos. Para quienes prefieran prendas más sofisticadas, los monos largos, de corte recto o 'palazzo', han ocupado el hueco que dejaron, hace ya algunas temporadas, los vestidos hasta los tobillos.

Las faldas plisadas, con volantes o asimétricas, por debajo de la rodilla, se han introducido en los percheros de las firmas de moda y este verano se han propuesto quitarle el protagonismo a las reivindicadas minifaldas. Casi cualquier estilismo estival puede cerrarse con uno de los complementos más propios de estas fechas: las cestas y capazos. En su versión máxima para ir a la playa o la piscina o en tamaño reducido para lucir con cualquier conjunto durante el día.

Aunque las rebajas no solo sirven para hacerse con las últimas tendencias. La diseñadora zaragozana Natalia de Nacho recomienda aprovechar los descuentos para completar el fondo de armario con prendas de calidad y de corte atemporal que "realmente nos puedan servir durante más tiempo".