10 trucos para acabar con el estrés

“¡Vale ya, cuanto estrés!” Cuantas veces no diremos esto a lo largo del día, o se lo escucharemos decir a  otro. Admitámoslo: las prisas y las obligaciones diarias no nos dan tregua.  Por no hablar de aquellas puntas de trabajo en las que no damos abasto y en que acabamos de los nervios. Aquí os dejamos unos cuantos consejos para machacar al estrés.

Trucos para que el estrés no acabe con nosotros
Trucos para que el estrés no acabe con nosotros
Kues/Freepik

1.- Haz listas. Pon en una lista tus lo que tienes que hacer a lo largo del día, marcando las tareas prioritarias y, a ser posible, un horario para hacerlas. Te ayudará a sentir menos agobio por tus obligaciones.


2.- Crea espacios en tu jornada. Define tus límites y no te sobrecargues con tareas a las que no vas a poder llegar, y resérvate un poco de tiempo para ti, aunque solo sean 10 minutos de cuando en cuando. Te permitirá a rendir más en lo que hagas y valorar qué es lo realmente importante.


3.- Concédete un premio cuando consigas un objetivo. Gratifícate por las metas logradas, concedete un regalo, que sea un objeto muy deseado o un fin de semana en un sitio soñado. Seamos coherentes: si has cumplido tu dieta no puedes premiarte con una palmera de chocolate, pero tener un merecido regalo te ayudará a poner más empeño en tus objetivos.


4.- Muévete. Para afrontar el esfuerzo del estrés se necesita realizar actividad física. El deporte es un óptimo antiestrés. Sea en un gimnasio o al aire libre, practicar una disciplina deportiva te ayudará a descargar tensión y a encontrar el justo equilibrio psico-físico.


5.- Come sano. Seguir una alimentación sana y equilibrada es fundamental. Lo que ponemos cada día en el plato nos permite no solo estar en forma sino afrontar del mejor modo la montaña de responsabilidades a las que nos enfrentamos cada día.


6. No descuides el descanso. Asegúrate de dormir las horas suficientes y mantén un horario regular al acostarte y levantarte. Una mala calidad de sueño nos lleva a estar estresados y cansados durante el día. Para ayudarte a conciliar el sueño, realiza actividades relajantes antes de acostarte, como leer un libro.


7. Libérate de la palabra ‘deber’. No todo el estrés es negativo. Existes el estrés positivo, llamado eustrés, que es la agitación que sentimos ante una experiencia placentera, ante un desafío que nos gusta o una meta que nos motiva. Si los objetivos se vuelven metas deseadas, el estrés desaparece.


8.- No dramatices. Aprende a reírte de ti mismo y de tus errores. Te ayudará a hacer más ligeras y llevaderas las jornadas y a afrontar con un espíritu positivo los pequeños y grandes empeños cotidianos.


9.- Apunta a objetivos concretos. Fíjate unos objetivos concretos y focaliza en ellos tu atención. No te dejes distraer por pensamientos o preocupaciones inútiles.


10.- Cree en ti mismo. Desarrolla un grado realista de confianza en tus capacidades y en tus recursos personales. Si tú no crees en ti mismo ¿por qué los demás iban a hacerlo?

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