Premios Magister a la labor callada para mejorar la educación

En muchos colegios rurales y centros educativos públicos de Aragón se promueven iniciativas para mejorar la formación de los alumnos que, sencillamente, no se conocen. Cuando hace unos años se puso en marcha la Asociación Mejora tu Escuela Pública se intentó resolver esta carencia y así fue como el año pasado nacieron los Premios Magister.

Ayer se celebró su segunda edición y hasta la Biblioteca de Aragón se acercaron los galardonados. Enrique Pérez, María Pilar Marco, Ignacio Mainer y Teresa Elizalde, de la junta directiva de la entidad, ejercieron de anfitriones ante un auditorio formado mayoritariamente por maestros. En el acto también participó el director general de Personal y Formación del Profesorado, Tomás Guajardo.

Antes de la entrega de los premios, el catedrático emérito Santiago Petschen impartió una conferencia sobre ´La dimensión artístico-creativa de la clase` y, a continuación, llegaron los reconocimientos. Carolina Calvo, maestra de infantil del centro rural agrupado Bajo Gállego, recibió uno de ellos por su labor con las nuevas tecnologías y, especialmente, por la creación de un blog “para transmitir el trabajo de clase a familiares que incluso viven fuera de España”.

Alfonso Lárazo, del centro de educación especial Gloria Fuertes de Andorra, recogió el galardón que reconoce su forma de resolver los conflictos. Su despliegue de aulas y herramientas, después de hacer luchado durante muchos años por contar con los mejores medios, es todo un ejemplo para la Asociación Mejora tu Escuela Pública.

El tercer premio Magister lo recibió Ángel Navarro del colegio María Moliner de Zaragoza. Se trata de un centro con alumnos de muchas nacionalidades que, según se destacó, “está siendo pionero a la hora de trabajar la diferencia y la diversidad”.

Por último, también se concedió un Magister de honor, que en esta edición recayó en los Centros de Innovación y Formación del Profesorado (CIFE) de Aragón. Llegó a haber 17 vertebrando toda la geografía aragonesa, aunque en la actualidad solo quedan cuatro: María de Ávila y Juan de Lanuza, en Zaragoza; Ana Abarca de Bolea, en Huesca, y Ángel Sanz Briz, en Teruel. El premio lo recogieron Joaquín Conejo, Eloy Barrio, Ángel Alonso y Esperanza Mañas, quienes destacaron la importante labor que se realiza en estos centros. Además, animaron a muchos más maestros a que encuentren en ellos “su segunda casa”.