La familia que necesita un congreso para reunirse

Se han constituido como asociación y tienen hasta un sistema de becas propio.

Algunos miembros de la familia Cervera
La familia que necesita un congreso para reunirse
familiacervera.org

Hay familias tan numerosas que para reunirse necesitan organizar auténticos congresos, como el que celebran este fin de semana en El Puerto de Santa María (Cádiz) los Cervera, integrado por más de mil personas.


No todos han podido acudir a este nuevo congreso de la familia, que sí ha reunido a unos 400 Cerveras para mantener una tradición que iniciaron en 1973, cuando la generación 22 y 23 decidió comenzar a organizar reuniones para que no se perdieran los lazos de unión entre las distintas ramas y miembros de una familia tan extensa.


Los Cerveras realizan estos congresos cada cuatro años, una vez en Madrid y otra en Cádiz, dos lugares en los que residen bastantes de sus miembros.

En estos encuentros, que habitualmente reúnen a entre 400 y 600 miembros de la familia venidos de toda España y de varios países, se concentran cinco ramas de la familia Cervera.


Su apellido, explican, proviene de la segunda mitad del siglo VIII de la reconquista de Cataluña y de la baronía del Señorío de Cervera y hoy lo llevan más de mil miembros de la familia procedentes de Juan Cervera Signes, que, junto a su hermano, fray Juan Bautista Cervera Signes, obispo que fue de Cádiz y Ceuta entre 1777 y 1782, fundaron la rama andaluza del linaje, cuando el apellido había pasado ya diecisiete generaciones.


En la primera mitad del siglo XX el crecimiento de la familia fue más que exponencial. "Hay una pequeña explicación: en los años veinte hubo dos Cerveras que enviudaron y volvieron a casarse, y en total tuvieron diecisiete hijos uno de ellos y doce el otro", explica Pascual Cervera, presidente de la Asociación Familia Cervera.


Y es que los Cerveras decidieron en el 2001 constituirse en asociación, con su junta directiva elegida en elecciones cada tres años, para formalizar y profesionalizar las herramientas que han desarrollado para no perder los vínculos entre ellos, pues la familia, además de extenderse en número, empezó a desplegarse por España y por el mundo.


Además de estos congresos, desde 1976 editan un periódico llamado Cartas a los Cervera, que editan de forma semestral y en el que, entre otras informaciones, dan cuenta de los nuevos nacimientos, bodas y eventos familiares de cada uno de ellos.


Para todo ello han tejido una red de "enlaces" familiares, que hacen funcionar una asociación desde la que los Cerveras incluso han organizado un sistema de becas para los mejores estudiantes y ayudas a proyectos sociales en los que trabajan los religiosos y religiosas de la familia, todo un entramado que financian con cuotas anuales de los miembros y aportaciones.


Para los Cervera es "muy emotivo" llegar a este nuevo congreso, en el que la mayor es María Luisa Cervera, con 90 años, y los menores cuatro bebés.

"De toda la gente que viene, conoceré a un cincuenta por ciento", explica otro de sus miembros, de unos 40 años.


Pero eso no es problema, porque, en una familia tan numerosa como organizada, todos llegan al congreso con una tarjeta colgando en la que se especifican, por colores y todo, quién es y cuál es la rama de la que procede.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión