Se llama tecnología disruptiva. Cuando los resultados de una investigación cambian las reglas del juego se puede decir que son revolucionarios. Es lo que ha pasado con el proyecto Femtofotografía, del Graphics and Imaging Lab de la Universidad de Zaragoza: ha permitido fotografiar escenas a un billón de fotogramas por segundo, "suficientemente rápido como para poder fotografiar el avance mismo de la luz", explica, orgulloso, el fundador y director del Graphics and Imaging Lab, Diego Gutiérrez. Y ya siempre habrá un antes y un después en los estudios de imagen computacional. Más que merecido el Premio Tercer Mileno que ha recogido en la categoría Investigación y futuro.

En colaboración con el MIT Media Lab, el grupo de la Universidad de Zaragoza ha obtenido esta técnica computacional que "abre un abanico inmenso de posibilidades –apunta Gutiérrez–. Han surgido aplicaciones para prototipos de cámaras que permitirán ver con niebla, con humo, incluso objetos ocultos tras las esquinas". Quizá algún día las supercámaras del Graphics and Imaging Lab logren sustituir a los dañinos rayos X en imagen médica. Sus técnicas computacionales pueden romper muchas barreras, tenidas por insalvables en todos los campos de la imagen.

Nunca antes se había podido observar cómo un frente de luz (velocidad máxima de 300.000 km/sg) se propagaba a través de los objetos. Los investigadores de la Universidad de Zaragoza contemplaron, "no sólo cómo un pulso laser avanzaba a lo largo de una botella e interactuaba de manera casi hipnótica con ella, sino también cómo se forma el reflejo en un espejo", eventos tan rápidos que son incompatibles con el ojo humano.

Con mucho futuro

Gutiérrez insiste en que es investigación básica, que "aún no sabemos qué hacer con los datos del movimiento de la luz obtenidos en Femtofotografía". Así que el proyecto continúa. "A nivel físico es un tema complejo del que hay que sacar sentido". Pero ya podemos imaginarnos cómo veremos los tejidos orgánicos, los materiales... a un billón de fotogramas por segundo. Una investigación con mucho futuro.

Por lo pronto, el equipo de Diego Gutiérrez acometerá un nuevo proyecto con el departamento de Defensa de Estados Unidos: supercámaras que permitirán a soldados y bomberos ver perfectamente entre el humo o a agentes de seguridad detectar gente escondida tras una esquina.

"Femtofotografía es el proyecto científico del que me siento más orgulloso , –dice Gutiérrez–. Redefine las reglas del juego en captura de imágenes", como un día pasó con la aparición de la cámara lenta. Ahora, lo único que teme son "las prisas del sistema español de investigación, que lo quiere todo para ya". ACCÉSIT / Neuromed

Fármacos contra el parkinson. El Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI) de la Universidad de Zaragoza ha liderado el proyecto europeo Neuromed, para desarrollar nuevos fármacos y nuevas herramientas de diagnóstico en tres enfermedades neurodegenerativas, como el Parkinson, y en enfermedades raras como la Fenilcetonuria y la amiloidosis, "que son muy invalidantes y que, en muchos casos, carecen de tratamiento", explica Javier Sancho, subdirector del BIFI. Este grupo de investigación acaba de recoger, para Neuromed, un accésit de los Premios Tercer Milenio en la categoría Investigación y futuro.

Para Sancho, este proyecto representa "un gran reto social, sanitario, económico y científico". Ha dirigido un consorcio formado por seis socios de España, Portugal y Francia "para buscar nuevas moléculas que puedan curar y/o diagnosticar tres enfermedades neurodegenerativas". La estrategia: "Combinar técnicas computacionales y biofísicas para identificar y perfeccionar compuestos que luego se han ensayado en modelos celulares y animales". Neuromed ha creado y quiere ampliar la Red Neuromed de Expertos internacional que investiga enfermedades neurodegenerativas. Sancho sabe que todo es posible "si existe convicción en la sociedad y en las entidades financieras de que la ciencia es un valor en todos los sentidos". ACCÉSIT / Modelage

La edad del corazón. "El envejecimiento del corazón no depende de la edad. Es cosa de cada uno". El proyecto Modelage, del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A), estudia los diferentes patrones de envejecimiento cardíaco. "Reunimos los patrones de muchas personas para indagar en las posibilidades de padecer arritmias", explica Esther Pueyo, responsable de esta investigación, que ha merecido un accésit de los Premios Tercer Milenio en la categoría Investigación y futuro.

¿Qué novedades introduce el proyecto Modelage en los estudios del corazón? Pueyo cuenta que, a partir de ahora, con los resultados de sus investigaciones, "abordamos la caracterización de las arritmias de forma más integral, porque incorporamos datos de biopsias y electrocardiogramas y los integramos en modelos matemáticos que reproducen la actividad del corazón desde la célula hasta el cuerpo". Todo para saber más del envejecimiento del corazón y "arrojar luz sobre los variados ritmos de deterioro de las personas –señala la investigadora–, lo cual puede tener importantes repercusiones en la predisposición de un individuo a sufrir arritmias cardiacas".

?Pueyo subraya que Modelage, "puede servir para desarrollar herramientas no invasivas de apoyo a la toma de decisiones médicas y hacer avanzar la medicina preventiva personalizada".

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