Los tres testigos protegidos en el caso de la muerte del mantero de Salou han reafirmado este jueves ante el juez que la víctima, Mor Sylla, cayó solo del balcón, sin que previamente le tocaran los Mossos d'Esquadra que habían entrado en su casa para detenerle en una redada contra el top manta.

Según han informado fuentes judiciales, ante el juez decano de Tarragona, que investiga la muerte del mantero, de 50 años y origen senegalés, han comparecido este jueves los tres testigos protegidos en la causa: dos de ellos estaban en una cafetería de la plaza cuando la víctima se precipitó desde el balcón y el otro se encontraba en un piso cercano.

Ante el juez, los tres testigos han corroborado lo que ya explicaron ante los Mossos d'Esquadra, en el sentido de que no vieron ningún tipo de contacto físico entre el mantero fallecido y los agentes que entraron en su vivienda para arrestarle, en la redada contra el top manta que llevaron a cabo el pasado 11 de agosto. Con la declaración de estos tres vecinos, que no había sido anunciada previamente dada su condición de testigos protegidos, ya han comparecido ante el juez nueve personas -los otros han sido el hermano del fallecido y sus cinco compañeros de piso- y todos han coincidido en que no vieron ningún tipo de contacto entre la víctima y los Mossos.

Según las mismas fuentes, el juez no ha decidido todavía si cita a los agentes de los Mossos que entraron en la vivienda en la que se encontraba la víctima para tomarles declaración sobre lo ocurrido.