Ante las elevadas temperaturas registradas, coincidiendo con la práctica del Ramadán, UGT Aragón hace un llamamiento a los trabajadores temporeros de origen musulmán, para que sigan las recomendaciones y consejos preventivos para evitar los golpes de calor y a los empresarios, que cumplan la normativa en materia de prevención de riesgos laborales.

En el sector agrícola, el ayuno se percibe con una mayor exposición a los riesgos laborales, ya que el esfuerzo físico es mayor y la actividad se desarrolla al aire libre, realizando trabajos pesados, manejando vehículos, maquinaria (tractores) y otros elementos cortantes de menor tamaño (tijeras, azadas...) que requieren concentración. No sólo se maximiza el riesgo de sufrir el llamado golpe de calor, sino que puede derivar en consecuencias tan graves como el fallecimiento.

La falta de ingesta de líquidos y alimentos y el cambio de costumbres (horario de sueño e ingesta abundante fuera del horario del sol) puede ocasionar una mayor tendencia a sufrir cansancio, desmayos, dolores de cabeza, debilidad, bajadas de tensión, deshidratación, lipotimias, etc.

Acciones relacionadas con la organización y condiciones de trabajo como modificar horarios de la jornada laboral, disponer de instalaciones con habilitación de espacios adaptados (duchas o lugares donde refrescar el cuerpo), zonas de sombra con toldos y similares, etc. y el disponer de formación e información específica para la prevención de riesgos laborales tales como seguir hábitos alimentarios saludables y compatibles con el trabajo durante este periodo, son medidas que pueden paliar los efectos del calor.

Para ello, es recomendable fomentar la formación e información específica de este colectivo muy especialmente durante esta práctica religiosa, respetando el derecho a la libertad de creencias y el cumplimiento de la seguridad en el trabajo.