Primer día de cole reivindicativo y en bañador

Padres de niños valencianos llevan a sus hijos a clase en bañador en protesta por la falta de refrigeración de los centros escolares

Primer día de cole reivindicativo y en bañador
Primer día de cole reivindicativo y en bañador
Efe

Radio Futura tenía razón cuando cantaba eso de «hace falta valor para ir a la escuela de calor». Soportar un calor asfixiante y sin ventilación forja el carácter, pero no es la mejor manera de aprender las cuatro reglas. Cuando el colegio es un horno, los alumnos salen escaldados. Lo saben bien algunos escolares valencianos que, para protestar por las insoportables temperaturas, han acudido a clase con bañador, chanclas y toallas. El más osado lo hizo incluso con gafas de bucear. 


La Comunidad Valenciana ha estrenado el curso escolar con el mercurio trepando por el termómetro. Algunos días se han llegado a alcanzar temperaturas de 30 y 35 grados en un centenar de centros educativos, cuando la normativa establece un máximo de 27 grados, según los sindicatos de la enseñanza. Ya se sabe que el aprobado se gana con el sudor de la frente. 


Los padres de alumnos del colegio Santa Teresa de Valencia, hartos de que la institución educativa cada vez se parezca más a una sauna, han decidido enviar a sus hijos a clase como si fueran a la playa. Nunca el uniforme escolar fue tan colorido. Porque aparte de las tonalidades chillonas de la ropa de baño, los educandos se presentaron luciendo vistosos complementos como flotadores y sombrillas. Con todo, las autoridades educativas de la comunidad no pecan de indolencia. Tras dar muchas vueltas al caletre han encontrado la solución. Han pensado que la mejor manera de aliviar los sofocos del alumnado es confiar en el hombre del tiempo y esperar que pronto bajen las temperaturas. ¿Para qué gastar dinero en un ventilador cuando es mucho más sano la llegada de un frente atlántico? La consejera ha dicho además que se trata de circunstancias climáticas «excepcionales» e «imprevisibles». 


A todo esto se une el malestar de los padres por la entrada en vigor de la 'ley Wert'. «Estamos muy quemados, no sólo por el calor, también por la falta de profesores y la Lomce», aseguró Jordi Boluda, miembro del AMPA del colegio. La vuelta al cole en plan 'Verano azul' está marcando tendencia. De hecho, los críos del colegio de Santa Teresa no han hecho más que imitar a sus compañeros de los centros escolares de Almoines y Carcaixent, pioneros en apostar por una enseñanza refrescante. Los estudiantes del instituto Foios abandonaron el pupitre una hora antes de que se sonase el timbre, mientras que los de Vilallonga salieron al patio en busca del fresco. A los que cursan el Bachillerato nocturno al menos les debe de quedar el triste consuelo de disfrutar de la brisa de las noches de verano.


La Generalitat valenciana aduce que, si tuviera que suspender las clases cada vez que el sol abrasa, el curso no llegaría a 180 días lectivos. También es verdad que si algunos mandamases tuvieran que enmudecer cada vez que dicen una tontería el curso político duraría menos que una campaña electoral en Corea del Norte.