¿Por qué estudiar Filosofía?

A pesar de ser considerada una carrera en retroceso por algunos sectores, los estudios de Filosofía en la UZ gozan de buena salud.

Tres de los estudiantes de Filosofía de la UZ
Tres de los estudiantes de Filosofía de la UZ

Desde Sócrates hasta las nuevas teorías de la filosofía feminista o el debate sobre los límites éticos de la ciencia. El Grado de Filosofía de la Universidad de Zaragoza recibió la semana pasada el visto bueno de la DGA para continuar formando parte de los estudios reglados del centro durante al menos los próximos 6 cursos. Un trámite que nunca corrió el riesgo de tornarse en negativo pero que afianza una disciplina que en los últimos años, con la entrada del Plan Bolonia y otras reformas, había visto mermado su peso dentro del sistema universitario.


En Zaragoza, esta enseñanza cuenta con una salud superior a la de la media de las universidades públicas españolas. Cada año acceden a primero de carrera una media de 50 alumnos, una cantera de nuevos filósofos que, no obstante, no rehúyen identificar los impedimentos que puede suponer entrar en unos estudios cuyas salidas laborales, más allá de la crisis, siempre han sido limitadas.


“El que se mete a Filosofía ya sabe lo que quiere y a lo que se atiene”, valora Juanma, alumno de tercer curso de la Universidad de Zaragoza, quien confiesa sentirse muy a gusto por estudiar aquello que quiere, “aunque haya gente que no entienda la carrera de Filosofía como una titulación práctica”. Al igual que él, Laura, estudiante de segundo curso, e Inés, a punto de finalizar el grado, entraron a la carrera directamente desde las Pruebas de Acceso a la Universidad, eligiendo Filosofía por encima de otras opciones que manejaban.


“Es una carrera que te potencia en todo los sentidos. La Filosofía está realmente presente en todos los aspectos de la vida, y creo que ahora es más necesario que nunca debatir y conocer las distintas visiones que el ser humano ha construído, en primer lugar, para conocernos mejor, y en segundo para saber mejor hacia donde vamos”, explica Laura, la menor de estos tres alumnos, que también comparten clase con gente de mayor edad que cada año entra a la carrera para cubrir un interés que no pudieron satisfacer durante su juventud.

Hacia la docencia o la investigación


Como cualquier otro universitario, los alumnos del Grado de Filosofía cuentan con sus propias aspiraciones personales dentro de su disciplina, donde la docencia, la escritura, o la investigación han sido siempre las principales opciones de futuro al salir de la facultad. “Hay gente que cree que estudiar Filosofía es como optar por un 'hobby', y puede que lo sea para muchas personas que la estudian para enriquecerse personalmente, pero también existen vías para dedicarse a esto”, comenta Inés, quien a punto de finalizar la carrera se plantea ahora cursar un master de profesorado para orientar su formación hacia la docencia.


“Pensar en las posibles salidas laborales o en el futuro después de acabar la carrera es algo que, quieras o no, siempre te viene a la cabeza. Y más con la actual situación, cuando tus amigos te plantean que a qué te dedicarás después”, confiesa Juanma, que no obstante asegura que volvería a seguir los mismos pasos que le llevaron a matricularse en el grado hace ya tres años. “Se lo digo a todo el mundo, yo he aprendido mucho más en estos tres años que en todo lo que había hecho antes. Y si alguien se está pensando ahora entrar a Filosofía u optar por otra titulación con más salidas, yo le animaría a hacer aquello con lo que se sienta más identificado”, señala el estudiante.


Ahora, con la intención de extender la titulación y ofrecer a los universitarios una mayor especialización, la Universidad de Zaragoza está trabajando para lanzar un master interuniversitario con la colaboración de las universidades de Murcia y de La Laguna, en Tenerife. Una nueva titulación que busca dar continuidad al trabajo que en los últimos años se ha venido haciendo en la carrera, según explican desde la dirección del Grado.