Análisis

Manzanas gratis

Apple ha anunciado que tanto su nuevo sistema operativo, como sus aplicaciones para la edición de documentos, música y vídeo, serán gratuitas. No, no se han vuelto locos en Cupertino, ni tampoco han convertido la compañía fundada por Jobs en una ONG.

Tim Cook durante la presentación
Manzanas gratis
AFP

Ofrecer 'software' gratis no es en realidad algo nuevo. Desde hace años, millones de usuarios de móviles y tabletas están acostumbrados a que el sistema operativo de sus dispositivos, y sus actualizaciones, así como muchas de las aplicaciones que utilizan, les salgan por la cara.


Apple está actualizando las características del sistema operativo tradicional, al mercado del siglo XXI en el que el consumidor, por suerte para unos y desgracia para otros, ya no está acostumbrado a pagar por algunas cosas. Pero, ¿qué gana Apple con esto?


Por un lado, gana en imagen, porque a una compañía, y más a Apple, se le llena la boca cuando sube a un escenario y dice gratis; y porque, al fin y al cabo, es una buena noticia para el usuario final, que puede disfrutar de las bondades de un nuevo y fantástico software, sin rascarse el bolsillo... Bueno, siempre que su 'hardware' se lo permita.


Y ahí viene la segunda parte de la estrategia de Tim Cook, y es que en la compañía saben que la gratuidad del 'software' les llevará a vender más equipos y, por lo tanto, a la larga, a ganar más dinero. 


Sí, muchos de los nuevos programas son gratuitos, pero con ese 'divertido' asterisco que reza: "Con la compra de un nuevo equipo". Por lo que se podría discutir si este 'software' es realmente gratuito o viene incluido en el precio del dispositivo. Es, sin duda, un valor añadido.


Por otro lado, muchos usuarios saben de sobra, porque lo han vivido en sus propios equipos, que una actualización de iOS puede llevar a que un iPhone que hasta unos días parecía antiguo pero iba como la seda, se convierta en un iPhone que parece nuevo pero va a trompicones.


Hay una máxima muy interiorizada al otro lado del charco que dice: "Si algo no está roto, no lo arregles". Pero, para algunos, es difícil de seguir cuando le presentan una nueva y flamante actualización y además le dicen que es gratis.

Renovación obligada

Aunque la gratuidad del 'software' fue tal vez lo que más sorprendió a muchos, lo más esperado del día erán sin duda los nuevos modelos de iPad.


El dispositivo portátil de Apple sigue en su trono de 'satisfacción al usuario' y ' horas de uso', pero ya hace tiempo que ve peligrar su hegemonía de ventas ante la versatilidad de sus competidores.


El iPad ha cambiado ahora de nombre y se llama iPad Air, en un intento de la compañía de destacar sus novedades, véase: es más ligero, más fino y más potente. 


Poco más se puede decir de este nuevo modelo, que es la evolución necesaria y previsible de un dispositivo que en pocos años ha cambiado el mercado y la electrónica de consumo tal y como la conocíamos, creando una categoría completamente nueva.